El Cefot defiende que el protocolo se ha cumplido "a rajatabla" en el caso de presuntos abusos sexuales en el acuartelamiento. Esta fue la única declaración a la que hizo referencia el coronel jefe del centro, Juan Manuel Martel, que no quiso entrar en detalles sobre el asunto e incidió en que la instrucción del asunto la realiza ahora el tribunal militar. En declaraciones a este diario, incidió también en que la máxima en el centro es la "tolerancia cero" con cualquier tipo de violencia que se produzca en la base. 

El alto mando se pronunció así dos días después de que saliera a la luz, tal y como publicó este rotativo, que una alumna ha interpuesto una denuncia a un suboficial en una de las compañías por realizarle tocamientos sexuales cuando ella se encontraba inconsciente. Lo hizo presuntamente en presencia de compañeros, también alumnos, que se enfrentaron a él por su comportamiento y más tarde declararon como testigos de los hechos. Una vez que se tuvo constancia de la denuncia, el caso fue remitido al tribunal militar para que instruya las diligencias y en la base se aplicó la normativa que establece como punto principal que se aparte a la víctima del presunto agresor. Se da la circunstancia de que la soldado abandonó las instalaciones días después ya que concluyó su formación y se marchó a incorporarse a su unidad aunque que no se ha revelado su destino. 

De este modo, el suboficial fue apartado de la unidad en la que se encontraba en un principio pero sigue en las instalaciones desempeñando sus labores hasta que se resuelva la investigación. A preguntas de este diario, no se precisó si el suboficial forma parte de la plantilla o si es personal militar contratado solo durante el periodo de formación de los ciclos de alumnos. En el centro, entre personal militar y civil hay en plantilla 150 personas y se da trabajo a entre 40 y 50 más cuando llegan los reemplazos.

En relación al cargo que ocupa el acusado de presuntos abusos en el centro, sí ha trascendido que es sargento primero, uno de los mandos que habitualmente se encuentra en contacto más directo con la tropa. En el rango militar de suboficiales se encuentran por orden de escala el suboficial mayor, el subteniente, los brigadas, los sargentos primeros y por último los sargentos. Asimismo, a preguntas sobre el ambiente que se vive en el centro, fuentes del propio Cefot aseguraron que al margen del asunto, que "sigue su procedimiento", el clima "es de absoluta normalidad" y que desde el acuartelamiento trabajan "a pleno rendimiento" para recibir este próximo lunes al nuevo reemplazo de 1.600 alumnos que se incorpora para recibir formación los próximos meses. 

En cuanto a que la instrucción del caso está siendo dirigida por un tribunal militar, la base defiende que "se aplican mismas leyes" que en un tribunal civil y que se instruye en esa sala puesto que los hechos tuvieron lugar dentro de una base del Ejército. En cuanto a los pasos que seguirá el procedimiento judicial, es ahora la fiscalía la que tiene que estudiarlo y estimar si aprecia delito. En el caso en que así sea, continuará la instrucción y el acusado será juzgado acorde al código penal militar, que en lo relativo a delitos de abuso sexual establece penas que oscilan entre los seis meses y los cinco años de prisión.

"Muchas denuncias no llegan a nada"

Por su parte, el subdelegado de Defensa en Cáceres, Manuel del Pozo, aseguró este miércoles que no había sido informado del presunto abuso sexual cometido por parte de un sargento a una soldado alumna del Cefot y que cuanto sabía de él ha sido a través de los medios. "No tengo por qué ser informado, es una cadena que desconozco. Aquí solo hay una unidad, pero en Andalucía el delegado de Defensa tiene unidades del ejército de tierra, armada, ejército del aire…; si hubiera diez casos y de todos tuvieran que informarle, no haría otra cosa que estar pendiente de esos casos", ha espetado el mando.

Según unas declaraciones que recoge la Agencia Efe Del Pozo ha insistido en que «hay tolerancia cero» y ha remarcado: «En este caso no tengo ninguna información, pero entiendo que se han seguido los protocolos de actuación establecidos en Defensa para esclarecer los hechos», ha expuesto momentos antes de participar en las II Jornadas de Liderazgo, organizadas por el Ministerio de Defensa y la Universidad de Extremadura.

Así, ha explicado que existen unidades de protección frente al acoso (UPA) en el Ministerio de Defensa y cada uno de los ejércitos para que cualquier militar, sea hombre o mujer, que considera que ha sufrido acoso, ya sea sexual o laboral, pueda activar el protocolo. "La UPA -ha dicho- actúa de oficio para intentar solventar el problema, saca a la persona que sufre el acoso del acosador y actúa, o bien judicialmente, profesionalmente o bien disciplinariamente contra el acusado, pero antes hay una investigación, que se hace súper rápido", ha detallado. Para ello, en esas unidades hay un jurídico que asesora si el hecho puede ser una falta, un delito o no llega a nada, como pasa, ha dicho, con "muchas denuncias".