Entrevista

El migrante que provocó el aterrizaje del avión patera en Mallorca: "He estado 14 meses preso por la cara, soy una víctima"

"Yo iba a Turquía. No sabía nada de ningún plan organizado en Facebook ni conocía al resto de pasajeros. Por su culpa he estado en la cárcel más de un año", reitera el joven

El migrante que provocó el aterrizaje del avión patera en Son Sant Joan: "No tengo culpa. No conocía a la gente que salió a la pista".

Diario de Mallorca

Yassine Jaouhari (Marruecos, 1997) está considerado el cabecilla del avión patera que aterrizó en noviembre de 2021 en el aeropuerto de Palma por una discutida dolencia que sufrió en pleno vuelo. Como el resto de acusados, quedó libre por la derogación del delito de sedición, aunque la Fiscalía pide para él tres años y medio de cárcel por delitos de coacciones y favorecimiento de la inmigración ilegal. Hoy apuraba exultante sus últimas horas en Mallorca, después de que la Audiencia le haya dado permiso para instalarse con su hermana en Madrid.

¿Había estado antes en España?

Sí. Llegué en 2016 a Madrid. Estuve cuatro años viviendo con mi hermana y el 18 de noviembre de 2020 volví a Marruecos. En Palma nunca había estado.

¿Por qué iba en el avión?

Iba a Turquía. Ya había estado allí varias veces, lo puedo demostrar con los sellos del pasaporte. Iba a estar un tiempo allí, no tenía un plan establecido.

¿Conocía a algún otro pasajero del avión?

No, iba yo solo.

Qué recuerda de lo que sucedió a bordo?

No recuerdo nada. De la gente que salió corriendo por las pistas no conocía a nadie. Tampoco me acuerdo del chico que vino conmigo al hospital. Dicen los médicos que estaba muy enfermo, muy mal. Por eso el comandante pidió aterrizar de emergencia en Palma.

Pero los informes médicos de Son Llàtzer dicen que cuando usted llegó al hospital no sufría ninguna dolencia grave.

Es mentira. Pasé dos horas y media en el hospital. Tenía el corazón muy acelerado, estaba enfermo. Si no estaba grave, ¿por qué los médicos que iban en el avión le dijeron al comandante que tenía que aterrizar enseguida? No era una tontería, mi vida estaba en peligro. La gente aprovechó eso para salir del avión.

Una vez en el hospital, la Policía lo detuvo.

Sí, vino la Policía. Yo no sabía nada de lo que había pasado en el aeropuerto. Lo juro por Dios, no sabía nada. Me cogieron y me llevaron a la comisaría del aeropuerto. El jefe de la Policía me habló mal y me trajeron a la Jefatura de Policía de Palma. Allí me trataron normal. El día siguiente, a la una de la madrugada me volví a sentir mal y tuvo que venir un médico al calabozo para mirarme el corazón. Me dieron una pastilla que me había dado el médico en Marruecos para la diabetes. Estuve tres días en el calabozo.

Su versión es que sufrió una crisis diabética en el avión, pero esa enfermedad no consta en los informes de la causa judicial...

Los médicos de Marruecos no son tan especialistas como en España. Me dijeron que tenía diabetes y que cuando me pongo nervioso, me sube mucho el azúcar.

Y luego pasó a disposición judicial.

El 8 de noviembre me llevaron delante de la jueza. Ni uno solo de los pasajeros que habían detenido declaró. Solo yo. Le dije que no conocía a ninguno de los que se habían fugado del avión, ni sabía nada del grupo de Facebook ni nada. Yo había vivido en Alcalá de Henares. No le podía hacer eso a España. Quiero a España tanto como a Marruecos en mi corazón. La jueza me preguntó por qué no llevaba insulina si era diabético. Yo no lo sé, no soy médico.

Pero no le creyó y decretó su ingreso en prisión. ¿Cómo ha sido su paso por la cárcel?

He estado en la cárcel 14 meses por la cara. Por la cara. Yo nunca había estado en prisión. Los funcionarios del módulo 2 se han portado muy bien conmigo, son buena gente. He trabajado allí, mi familia me enviaba dinero... Tuve un problema con otro preso, un marroquí que me pegó un puñetazo en la nariz porque el hablaba mal de Mohamed VI, el rey de Marruecos, y yo lo defendía. Fue el día 22 de diciembre de 2022, tuvieron que llevarme al hospital en ambulancia. Pero también he hecho un buen amigo que me ha ayudado mucho, dándome ropa y comida, y ahora es como mi hermano.

¿Sabía que, como sostiene la Fiscalía, hubiera un plan organizado a través de Facebook para desviar el avión y llegar a Europa de forma irregular?

No sé nada de eso. No tengo la culpa de que pasara. Nunca he pensado en atacar a España. Todo es mentira. La Policía me quitó el móvil, lo revisó y no han encontrado nada de nada. No soy peligroso.

¿Las autoridades marroquíes le han ayudado durante este tiempo?

Nada de nada. Escribí al consulado de Marruecos en Palma, pero no me ha dado ni un euro para comprarme un poco de pan. También contacté con la embajada, pero no me contestaron.

Le acusaron de un delito de sedición, con penas de hasta 15 años de cárcel, pero un cambio legal les ha acabado beneficiando.

Estuve muy mal cuando supe que pedían tantos años de prisión. No sé nada de ningún cambio de la ley. Soy una víctima, la culpa es de la Policía, porque no había seguridad en el aeropuerto para evitar la fuga.

¿Cuándo supo que iba a quedar en libertad?

El mismo día, el 17 de enero. No me lo creía, estaba muy feliz. Por la tarde vino un agente judicial a decirnos que quedábamos libres, no lo esperábamos. Cogí las maletas y salí con el funcionario. Yo no he hecho nada. En Madrid trabajaba de vigilante de una obra y nunca he tenido problemas. Soy una víctima del avión patera. Si hubiera sabido que iba a acabar en la cárcel no hubiera cogido ese avión. Al final estoy en la calle, Dios es grande.

En la cárcel ha estado con muchos de los pasajeros que se fugaron del avión. ¿Ha tenido trato con ellos?

No he hablado con ninguno de ellos. Son los culpables de que yo haya estado en la cárcel, sin ellos no había entrado. No me gusta ni una de las personas que iban en el avión. Por su culpa, mi padre murió el 30 de diciembre, estaba muy afectado por mi situación. También murió mi abuela en marzo de 2022.

¿Qué ha hecho tras su salida de la cárcel y qué planes tiene?

En Mallorca no conozco a nadie. Estoy viviendo en un albergue que me cuesta 20 euros al día. Ahora me dejan irme a Madrid, donde vive mi hermana, y me quedaré en su casa. El juicio tardará en celebrarse.