Estaba previsto que saliera a las 10.40 horas, pero al tratarse de un tren de 16 vagones y dos pisos, el acceso de viajeros se ha complicado y el convoy no se ha puesto en marcha hasta las 10.57 horas. Con destino a Madrid, este Ouigo de alta velocidad tenía que parar antes en Zaragoza. Pero unos 200 metros después de abandonar la estación de Sants se ha detenido por causas que todavía se desconocen. Los viajeros, cerca de mil, se han pasado más de dos horas encerrados, casi a oscuras, sin aire acondicionado, hasta que a las 13.15 horas, el tren ha vuelto a moverse. En todo este tiempo, se quejan, apenas han recibido información ni atención.

Momento en el que el pasaje del tren de Ouigo averiado subía a los vagones, la mañana del lunes.

Mercè ha subido en el tren y ha notado algo distinto: hacía calor. "Lo habitual cuando entras en un tren de alta velocidad es que haga frío, pero aquí se notaba que no funcionaba el aire". Ella viaja en el vagón de cola. Pocos segundos después de salir de Sants, el tren se ha detenido, "como si se hubiera quedado sin energía". Serían más o menos las 11 de la mañana. "Estábamos casi a oscuras y sin que circulara aire. Hemos conseguido que desbloquearan las puertas que separan los vagones. Casi hora y media después todavía no sabían nada, si podrían continuar hasta Madrid en algún momento o si su viaje se cancelaba.

Alud por el agua

Los viajeros, relatan, no han obtenido ninguna información hasta pasada casi hora y media desde la avería. "Primero nos han explicado lo obvio, que el tren tenía un fallo. Y luego nos han dicho que fuéramos al vagón 12 si queríamos agua. Es decir, que en vez de repartirla por todo el tren, que es inmenso, han generado un alud de gente en busca de una botella de agua". Asegura Mercè que dentro hacía mucho calor y que su vagón está repleto de gente mayor que van de viaje a Madrid. Han pasado nervios, pero se respiraba cierta tranquilidad. Ha llamado a la Guardia Urbana y al SEM, pero le han dicho que sin heridos, lo único que podían hacer era elevar la queja a la compañía propietaria del tren. Los baños, además, se han quedado sin papel higiénico. Sobre las 13.15 horas, el tren ha vuelto a moverse. Desde la megafonía se ha anunciado que todo volvía a la normalidad. Y que el "ouibar" volvía a abrir.