En los laboratorios españoles ya se están creando las terapias del futuro: tratamientos para enfermedades hasta ahora incurables, fármacos con 'nombre y apellido' para mejorar la vida de personas con patologías raras y herramientas que, más pronto que tarde, podrían mejorar la atención sanitaria de todos los ciudadanos. Para que todos estos proyectos salgan del 'tubo de ensayo' y lleguen a los centros de salud hace falta movilizar una cantidad ingente de recursos, agilizar la transferencia de conocimiento y reforzar la colaboración entre los centros de investigación y las empresas del sector. Estos son algunos de los retos y de las oportunidades que han destacado una decena de expertos del sector en la jornada de salud de vanguardia organizada esta semana por EL PERIÓDICO y el Ministerio de Ciencia e Innovación y que presentó el director del diario integrante del grupo Prensa Ibérica al igual que este medio, Albert Sáez.

El evento, celebrado este jueves en la sede del diario, se ha centrado en explorar diferentes aspectos del 'PERTE' de salud de vanguardia: uno de los once programas estratégicos lanzados por el Gobierno a partir de los fondos de recuperación pospandemia. "Esta inyección extraordinaria pretende ser un plan de choque para impulsar el potencial que ya tenemos en nuestro país. Pero no nos vamos a quedar ahí. Vamos a trabajar para dar continuidad a estas políticas", ha explicado la ministra de Ciencia, Diana Morant. "Gracias a la reforma de la ley de la ciencia, por ejemplo, vamos a blindar la financiación de la ciencia hasta llegar al 3% del PIB en 2030", ha destacado Morant durante su intervención en la jornada.

De izquierda a derecha, el director de El Periódico, Albert Sáez; Aitor Moll, consejero delegado de Prensa Ibérica; la ministra Diana Morant; la delegada del Gobierno, Maria Eugènia Gay, y el teniente de alcalde Jaume Collboni. Joan Cortadellas

Más allá de impulsar el trabajo de los laboratorios, el programa de innovación en salud también contempla facilitar la incorporación de herramientas digitales a los centros sanitarios. Según ha explicado Juan Fernando Muñoz —secretario general de Salud Digital, Información e Innovación del Sistema Nacional de Salud— ya se han lanzado varios proyectos para, por ejemplo, incorporar herramientas digitales para la detección precoz de enfermedades como la retinopatía, programas de vigilancia epidemiológica a partir de los historiales clínicos de los pacientes o plataformas de teleconsulta para casos de dermatología o salud mental. "Ya hemos impulsado 45 proyectos de este tipo", ha recalcado Muñoz para ilustrar el potencial de este sector.

El reto de la innovación en salud

Uno de los grandes retos de la innovación en el ámbito de la salud es la "muralla regulatoria" que tienen que superar las investigaciones para pasar del laboratorio a los centros de salud. Así lo han destacado en sus respectivas ponencias Cristóbal Belda, director del Instituto de Salud Carlos III, y Carlos de la Cruz, director de Evaluación y Cooperación Tecnológica Internacional del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI).

"Tenemos que fortalecer la colaboración entre los centros de investigación y la industria para que los tiempos de recorrido sean menores", ha destacado Belda durante su intervención. En este sentido, según ha añadido De la Cruz, será clave desarrollar "convocatorias para facilitar la cooperación entre los diferentes actores implicados en el proceso de diseño y desarrollo de estas herramientas".

De derecha a izquierda, Cristóbal Belda (director del Instituto de Salud Carlos III), Carlos de la Cruz (director de Evaluación y Cooperación Tecnológica Internacional del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación), Valentina Raffio (periodista de El Periódico), María Vila (presidenta de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria y presidenta de Medtronic España) y Juan López Belmonte (presidente de Farmaindustria y presidente de ROVI). Joan Cortadellas

Otro de los grandes retos pendientes del sector es la renovación de las infraestructuras y los equipamientos de los laboratorios, según ha destacado María Vila, presidenta de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria y presidenta de Medtronic España. En este sentido, el programa plantea la primera convocatoria en más de diez años para la renovación de equipamiento científico. Vila también ha destacado la necesidad de mejorar el acompañamiento a las start-ups sanitarias españolas.

Juan López Belmonte, presidente de Farmaindustria y presidente de ROVI, ha hecho hincapié en la necesidad de reforzar la colaboración entre las entidades públicas y las privadas para impulsar los proyectos sanitarios. "España es uno de los países líderes en ensayos clínicos. Tenemos todos los ingredientes necesarios para ser referentes en el sector, solo nos hace falta unirnos", ha destacado López durante su intervención. 

El reto de la formación de los profesionales

El despegue de todos estos proyectos de innovación en salud dependerá, en gran medida, del personal científico, técnico y administrador. Y esto, a su vez, dependerá de la formación de estos profesionales. Según ha explicado Ana Polanco, presidenta de la Asociación Española de Bioempresas y Head of Operations Europe en Merck, los programas más "disruptivos" en salud necesitan "perfiles multidisciplinares, innovadores y diversos" a todos los niveles. "Se necesitan expertos en ámbitos como la genética, la computación cuántica y la realidad aumentada aplicada a la medicina", ha ilustrado Polanco.

De izquierda a derecha, Valentina Raffio (periodista de El Periódico), Mariano Carballo (director del Gabinete Técnico de la Secretaría General de Formación Profesional del Ministerio de Educación y Formación Profesional), Ana Polanco (presidenta de AseBio (Asociación Española de Bioempresas) y Head of Operations Europe en Merck) y Juan Yermo (director general de Farmaindustria). Joan Cortadellas

Juan Yermo, director general de Farmaindustria, también ha destacado la necesidad de impulsar diferente tipos de perfiles dentro de la industria. "Hay que apostar por formar investigadores, pero también personal experto en innovación o producción. Para lanzar programas de salud de vanguardia se necesitan todos estos perfiles", ha destacado Yermo durante su intervención.

El sistema educativo ya se está poniendo en marcha para incorporar todos estos retos. Según ha destacado Mariano Carballo —director del Gabinete técnico de la Secretaría General de Formación Profesional del Ministerio de Educación— ya se está trabajando para incorporar a los programas académicos conceptos clave como tratamientos personalizados, medicina de precisión o inteligencia artificial. Por otro lado, también se está trabajando para impulsar programas de recualificación para profesionales en etapas más avanzadas de su carrera. 

"La ciencia salva vidas"

En la clausura del debate sobre salud de vanguardia, Raquel Yotti, secretaria general de Investigación del Ministerio de Ciencia, ha hecho hincapié en la importancia de seguir impulsado este tipo de proyectos innovadores. "La ciencia cura, salva vidas. Pero si no sale de los laboratorios, no sirve de nada. Necesitamos que la ciencia llegue al mercado, hasta los centros sanitarios y las estanterías de las farmacias. Si estos avances no llegan a mano de las personas, es potencial que se ha quedado por el camino", ha destacado Yotti durante su intervención.