Cuando los dos mayores incendios registrados en la historia de Galicia —los de O Courel y Valdeorras— aún no se han dado por extinguidos, el fuego vuelve a reclamar el protagonismo. Un frente comenzado alrededor de las 17:45 en las inmediaciones del club náutico de Castrelo de Miño había consumido alrededor de las 23:00 unas 100 hectáreas de terreno. Los agentes forestales de la Brigada de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) Laza, a su llegada a la zona, han augurado problemas: "Tiene muy mala pinta".

Las llamas, informa la Consellería de Medio Rural, comenzaron en la parroquia de Barral, cerca del embalse y de una zona poblada. Sin embargo, avanzan en la dirección opuesta, hacia el municipio vecino de Cartelle, por una zona de pinares muy densos. "Mucha continuidad de combustible, va a ser duro", anota desde su cuenta en redes sociales uno de los efectivos de la citada BRIF.

Pasadas las 21:30, se activó como medida preventiva la Situación 2, por proximidad de las llamas al núcleo do Pereiro. Antes ya se había tenido que cortar una carretera, al paso por Noalla de Abaixo.

En el incendio trabajan nueve agentes, 17 brigadas, 10 motobombas, dos palas, un técnico, una unidad técnica de apoyo, siete aviones y 11 helicópteros.

En la zona no se están registrando las condiciones climáticas extremas que propiciaron el avance desbocado de las llamas a lo largo de la semana pasada. Sin embargo, se trata de valores que sí rondan la ecuación 30-30-30: hay 32 grados, una humedad relativa del 34 % y rachas de viento 20 kilómetros hora.