Los Mossos d’Esquadra frustraron la noche del pasado viernes una orgía en un domicilio en Barcelona. Una de las personas que estaba convocada al festín sexual en plena pandemia tuvo un ataque de responsabilidad y optó por notificar la actividad a la policía catalana, que se desplazó al piso. La coyunda grupal todavía no había dado comienzo. Ocho personas fueron detenidas por los agentes y se les imputa un delito contra la salud pública. Al parecer, cuando los policías entraron en la vivienda fueron confundidos como integrantes de la fiesta. Pero no era el caso.

Al parecer, según el testimonio aportado por la persona que dio la alerta, la convocatoria incluía consumo masivo de drogas, y la orgía debía prolongarse durante toda la noche. En el momento cumbre se esperaba el concurso de hasta 30 personas. En una de las habitaciones, los Mossos d’Esquadra hallaron gran cantidad de estupefacientes (cocaína, speed, marihuana, pastillas y MDMA). También alguno de los participantes llevaba drogas encima en el momento en el que irrumpieron en la vivienda. El motivo oficial de la reunión era la presentación de una página web cuyo contenido no ha trascendido. Una vez expuesto el site se procedería a la fiesta. Y si lo propio son unas copas con ganchitos y canapés, en este caso la idea era una bacanal sexual que al final no pudo ser. Para más inri, una de las personas detenidas (todos tenían entre 23 y 34 años) tenía tos y fiebre, con lo que fue trasladada a un centro médico. Se le hizo la prueba del COVID-19 y dio negativo.

Los arrestados siguen detenidos en la comisaría de Les Corts a la espera de pasar a disposición judicial. Será el juez de guardia quien dictamine si los mantiene encerrados o si les libera. La policía valora también si deben ser multados por saltarse el confinamiento.