Autoridades y vecinos de Navarra afrontan ya las tareas de evaluación y reparación de los daños provocados por las lluvias torrenciales y la repentina avenida del río Cidacos en localidades como Tafalla, Olite y Pueyo, que se ha cobrado la vida de un conductor cuyo coche fue arrastrado por el agua. Una línea de tormentas muy activas dejaron el lunes cifras récord de precipitación en Navarra, de más de 160 litros por metro cuadrado de 16.30 a 19.30 horas aproximadamente.

Estas fuertes tormentas provocaron una súbita crecida del río Cidacos, que afectó especialmente a la localidad de Tafalla, algunas de cuyas calles se transformaron en ríos que arrastraron los coches aparcados y el agua inundó viviendas, garajes, comercios y edificios públicos, como la escuela infantil, que está cerrada.

El pleno municipal, reunido en sesión extraordinaria, acordó solicitar la declaración de zona catastrófica por los cuantiosos daños ocasionados por la riada, ante la que nada pudieron hacer los vecinos, porque «no teníamos ningún aviso de que pudiesen ocurrir unas inundaciones como las que se han producido», lamentó el alcalde, Jesús Arrizubieta. En este momento, «todas las manos van a ser más que necesarias» en los trabajos de limpieza, señaló el alcalde, quien consideró que en Tafalla tuvieron suerte de que no se produjeran daños personales.

Donde sí tuvieron que lamentar un fallecimiento por la riada fue en la localidad de Ezprogui, a unos 50 kilómetros de Pamplona, donde se halló el cuerpo sin vida de un conductor, vecino de Villava, de 25 años, arrastrado por el agua. Agentes de la Policía Foral y los bomberos, con la ayuda de un helicóptero, rescataron el cuerpo en una zona de difícil acceso, a causa de la vegetación y la gran cantidad de agua que todavía llevaba el río. El cuerpo fue trasladado al Instituto Navarro de Medicina Legal para la práctica de la autopsia.

En Tudela, una tormenta de grandes dimensiones, con fuerte viento y granizo, provocó también importantes inundaciones en varias zonas. Según informó el consistorio, efectivos de Bomberos y de la Policía Municipal tuvieron que retirar varios árboles caídos.

Por su parte, en Olite y Pitillas, otras localidades seriamente afectadas, se ha restablecido ya el fluido eléctrico a viviendas y empresas y en breve se espera que se pueda solucionar el problema de falta de agua que existe en alguna población. En Olite, la crecida del río fue la mayor desde que existen registros, ya que sobrepasó ampliamente la capacidad de medición, establecida en 5 metros de altura.

Los efectos de la riada aún se dejan notar en Navarra, donde seis carreteras secundarias permanecen cortadas en Santacara, Pitillas, Murillo el Cuende, Olite y Beire. Además, Adif ha suspendido la circulación ferroviaria entre Tafalla y Garinoaín por acumulación de agua, que en algunos puntos sobrepasó la altura de carril. Aunque aún es pronto para realizar una evaluación precisa, las inundaciones y el granizo han causado daños importantes en los cultivos de Navarra, según el presidente del sindicato agrario UAGN, Félix Bariain.

VISITA DE LAS AUTORIDADES / La presidenta en funciones del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, se desplazó ayer a la zona para reunirse con los alcaldes de las localidades más afectadas por las inundaciones. Subrayó que la seguridad en los trayectos por carretera y en los edificios es la prioridad y anunció la gratuidad del peaje de la AP-15 en Imarcoain mientras dure la reparación de la N-121. Barkos resaltó la importancia de que los plenos de los ayuntamientos afectados, como ha hecho el de Tafalla, pidan la declaración de zona catastrófica para la solicitud de las ayudas pertinentes.

El delegado del Gobierno en Navarra, José Luis Arasti, que también visitó la zona, se puso a disposición de los ayuntamientos para informar de las ayudas previstas por el Gobierno de España para estas situaciones de emergencia. También el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, expresó su solidaridad con la familia del conductor fallecido en Navarra. «Mi solidaridad con todos los vecinos y vecinas afectadas y mi agradecimiento a los equipos de emergencia», señala en un tuit.

El rey Felipe VI telefoneó ayer a la presidenta Uxue Barkos para transmitirle sus condolencias por la persona fallecida en las inundaciones. El Rey, además, trasladó su felicitación a todos los miembros de los dispositivos que han trabajado para atender las emergencias.