La Policía Nacional y la Guardia Civil han desarticulado dos organizaciones de narcotráfico que se habían aliado para introducir alijos de hachís por las playas de Conil de la Frontera (Cádiz) en una operación en la que han detenido a 33 miembros de estas redes e incautado 2.600 kilos de la droga. La operación Cornamusa, como ha sido denominado este dispositivo conjunto de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, ha acabado con estas dos redes que operaban en la comarca de la Janda y que se dedicaban a introducir hachís procedente de Marruecos por vía marítima.

La investigación se inició el pasado verano de 2017, cuando los agentes identificaron a un grupo de personas con antecedentes por narcotráfico que se habían organizado para introducir un alijo de hachís por la costa de Conil. Los investigadores establecieron dispositivos de vigilancia para averiguar si se trataba de un hecho puntual o si el grupo había formado una organización dedicada al narcotráfico.

Durante las investigaciones, los agentes descubrieron que tenían dos ramas bien diferenciadas, asentada una de ellas en la localidad de Conil y la otra en la de Barbate. Esta última tenía varios de sus miembros con amplios antecedentes por narcotráfico.

Los investigaciones se enfocaron en localizar a cada miembro, determinar sus roles dentro de la red, e identificar los domicilios, vehículo y las naves industriales que utilizaban para preparar las embarcaciones.

Así, el 24 de agosto de 2017, en la zona de las calas de Roche los agentes interceptaron el alijo que habían organizado. Fueron entonces incautados 780 kilos de hachís y detenidas las cuatro personas que viajaban en la embarcación recreativa que trasportaba la droga en un doble fondo.

PLAYA DE LOS BATELES / Los miembros de la organización se volvieron a rehacer para organizar otro alijo por vía marítima. En este caso se llevó a cabo el pasado 20 de marzo, cuando fueron detenidas otras cuatro personas que acababan de cargar 1.530 kilos de hachís en dos vehículos en la playa de los Bateles, en pleno centro de la localidad de Conil.

Tras estos golpes, la rama de la organización asentada en Barbate, organizó de manera independiente un nuevo alijo de 300 kilos, que también fue interceptado en un operativo en el que se intervino una embarcación semirrígida y se detuvo a los dos tripulantes que viajaban en ella. Tras todas estas operaciones, los investigadores completaron el organigrama de la organización, y detuvieron a otras 23 personas en la comarca de la Janda. Todas estas diligencias han sido tuteladas por la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de los de Chiclana de la Frontera.