Algunos madrileños han hecho caso omiso este jueves del protocolo anticontaminación que prohíbe circular por la almendra central de la capital a los vehículos con matrícula par y utilizan sus coches pese al riesgo de ser multados con 90 euros. En un primer momento, la policía municipal solo advertía a los automovilistas. Ahora ya sanciona.

En varias calles del centro de Madrid, como en la plaza de España, hay ciudadanos que circulan con matrícula par para desplazarse a su lugar de trabajo pese a que el ayuntamiento de la capital ha restringido el tráfico a la mitad del parque móvil.

Madrid es la primera ciudad de España que aplica una medida como esta para tratar de reducir la contaminación, que implica que este 29 de diciembre solo puedan moverse los vehículos con matrícula par por las calles comprendidas dentro de la M-30.

Los únicos vehículos que tienen permitido saltarde la prohibición son los taxis, las motos, aquellos con tarjetas de movilidad reducida que sean conducidos por el titular, los híbridos o eléctricos y los de alta ocupación que transporten a tres o más personas.

A su vez, la Empresa Municipal de Transportes (EMT) ha reforzado el servicio en un total de 55 líneas de su red, fundamentalmente aquellas que cubren las conexiones entre los distritos de la periferia y la almendra central (perímetro interior de la M-30).