El Hospital Clínico de Barcelona, en colaboración con el Instituto de Ciencias del Mar del CSIC, creará una unidad especializada en picaduras de medusa que investigará las mejores alternativas paliativas e incluso la posibilidad de la creación de antídotos. El programa, llamado Reclaimed e impulsado por la Obra Social La Caixa con 600.000 euros, se presentó ayer en Barcelona y se prolongará durante un periodo de tres años.

Para las medusas no existe ningún tratamiento específico más allá de la aplicación paliativa de frío (pero sin que el hielo toque directamente la piel), gasas bicarbonatadas o la extracción de los tentáculos, como recordó Santiago Nogué, de la Unidad de Toxicología del Clínico. Luego, si es necesario tratamiento hospitalario, se aplican en la piel antihistamínicos o cortisona, pero «la atención correcta y diligente por parte de los socorristas en la playa es clave», insistió. «Hay muy poco conocimiento sobre este tipo de lesiones», añadió José-Manuel Mascaró, del Servicio de Dermatología del mismo hospital.

Por otro lado, Reclaimed también incluirá la preparación de socorristas, modelos predictivos de la presencia de medusas y diversas medidas para informar en las playas catalanas de la previsible llegada de enjambres. Apenas el 1% de las picaduras de medusa requieren un tratamiento hospitalario, pero sí son un problema habitual -entre 10.000 y 40.000 anuales en las playas catalanas- con un gran impacto social.

EL PACIENTE / Nogué precisó que los socorristas atenderán al afectado en la playa y le aconsejarán que, si no mejora en las 24 horas siguientes, acuda al médico de cabecera. Si se alarga más de una semana, la unidad del Clínic citará al paciente para ser tratado y estudiado a través de pruebas complementarias. H