El año 2015 siguió siendo "peligroso para la profesión de periodista", en particular en zonas de conflicto, según el balance anual presentado ayer por Reporteros Sin Fronteras (RSF), que destacó que hay más profesionales de la información secuestrados que el año anterior pero menos detenidos.

En la actualidad hay 54 periodistas secuestrados, un 35% más, la mayor parte de ellos en Siria, mientras que el número de encarcelados se ha reducido un 14% hasta los 153. A los periodistas secuestrados hay que añadir tres "ciudadanos-periodistas" y cuatro colaboradores de medios de comunicación. El balance destaca que Siria se ha convertido en el lugar más peligroso del mundo para ejercer la profesión. "Los periodistas representan un blanco fácil para grupos radicales como el Estado Islámico (EI) o el Frente Al-Nusra", indicó.

El EI es quien más periodistas mantiene secuestrados, 18, seguido de los Hutíes yemeníes con 9. El Frente Al-Nusra mantiene secuestrados a cuatro periodistas, entre ellos los españoles Angel Sastre, José Manuel López y Antonio Pampliega, raptados en Alepo el 13 de julio, señaló RSF.