El presidente ruso, Vladímir Putin, afirmó hoy que la comunidad internacional no debe permitir que vuelva a repetirse un acontecimiento como el genocidio armenio, la muerte de 1,5 millones de armenios a manos del Imperio Otomano, que calificó de "uno de los más trágicos de la historia de la Humanidad".

"El 24 de abril de 1915 es una fecha dolorosa, relacionada con uno de los acontecimientos más terribles y dramáticos de la historia de la Humanidad", señaló Putin, en un mensaje con motivo del centenario del genocidio, que se cumple mañana.

"Cien años después, inclinamos la cabeza ante la memoria de las víctimas de aquella tragedia, que en nuestro país siempre es recordada como un dolor y una desgracia propios", señaló en el mensaje, colgado en la página del Kremlin.

El líder ruso deseó a "la fraterna Armenia, a todos los armenios que viven en Rusia, paz y prosperidad" y aseguró que una "eliminación masiva por motivos étnicos no se puede justificar".

Putin viajará mañana a Armenia para participar en el principal acto en conmemoración del centenario de este hecho, que parte de la comunidad internacional, encabezada por Turquía, se niega a reconocer como Genocidio.

Ayer mismo, la Casa Blanca calificó de "horrorosa" la matanza de cientos de miles de armenios, pero evitó utilizar el término "genocidio".

Dentro de los actos del centenario, la Iglesia Apostólica Armenia, la más antigua del mundo, canonizará hoy al millón y medio de víctimas en la catedral de Echmiadzin, que acoge dos reliquias de renombre universal como una cruz del Arca de Noé y la supuesta lanza con la que el centurión romano Longinus clavó el cuerpo de Cristo cuando éste estaba colgado en la cruz.

El acto cumbre del centenario del genocidio tendrá lugar mañana, en el complejo memorial Tsitsernakaberd, al que asistirán los presidentes de Armenia, Serge Sargsián; Rusia, Vladímir Putin, y Francia, Francois Hollande.