La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) ha denunciado hoy, con motivo del Día Nacional del Trasplante, la escasez de órganos para trasplantar, especialmente pulmones, por lo que ha apostado por la donación en asistolia, es decir, cuando hay un paro cardíaco irreversible.

Durante el año 2014, en España se realizaron 262 trasplantes pulmonares, y desde el inicio de los trasplantes pulmonares con donantes en asistolia, en 2002, se han realizado 74 procedimientos de este tipo.

Según la Separ, que tiene su sede en Barcelona, la colaboración entre centros sanitarios es fundamental para garantizar el desarrollo de programas de trasplante pulmonar de donantes en asistolia eficientes y estandarizados.

Los neumólogos de esta sociedad han avisado que la escasez de órganos sigue siendo un importante problema, ya que conlleva el aumento de las listas de espera de los trasplantes pulmonares.

El uso de donantes con criterios extendidos, los donantes vivos, las técnicas de perfusión ex vivo y el uso de donantes en asistolia (controlada o no controlada) son algunas de las estrategias que permiten paliar la falta actual de órganos, según el cirujano torácico Andrés Varela.

"Los períodos prolongados de espera para conseguir un órgano para cada paciente repercuten en el aumento de la mortalidad de las listas de espera. En consecuencia, también se ven afectados los pacientes que llegan al trasplante casi al límite de su reserva o en situación de urgencia", ha explicado Varela.

"Como profesionales sanitarios -ha añadido- tenemos la responsabilidad de encontrar soluciones eficaces que permitan aumentar el número de órganos disponibles para estos pacientes. A día de hoy, los donantes en parada cardíaca, tanto controlada como no controlada, están aportando un número adicional muy relevante de órganos válidos para trasplantes".

Según este especialista, "la supervivencia de los pacientes trasplantados a partir de donantes en asistolia es del 83,3 %, mientras que los de donantes en muerte encefálica es del 80,3 %".

Los donantes en asistolia son aquellos pacientes que cumpliendo las condiciones clínicas de donación son diagnosticados de muerte por el cese irreversible del latido cardíaco.

La condición de irreversibilidad se produce por la falta de respuesta a las maniobras de reanimación cardiopulmonar o por lesiones incompatibles con la vida que generan la parada cardíaca.

La media de edad de los donantes en asistolia es inferior a la de los donantes en muerte encefálica.

"El límite propuesto al principio fue de 55 años, no obstante, en la actualidad se consideran incluso pacientes de 65 años, siempre y cuando estos cumplan con todos los criterios clínicos para ser donantes", ha dicho Varela.