El Pleno del Senado aprobó ayer, con la mayoría absoluta del PP, el proyecto de Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), que incluye una enmienda para asegurar que los alumnos del Bachillerato de Ciencias Sociales estudien Matemáticas obligatoriamente. La tramitación parlamentaria de la reforma que defiende el Ministerio de Educación terminará cuando el Congreso ratifique los cambios que ha introducido la Cámara Alta.

Tras ser aprobada la Lomce con 136 votos a favor, 81 en contra y las 3 abstenciones de UPN, se han oído dentro de la sala del Pleno algunos gritos de "¡fuera, fuera!" como crítica a la reforma.

La jornada transcurrió entre el debate de las cerca de 900 enmiendas parciales y las negociaciones de última hora para que también se pudiera votar una propuesta que cambiara la organización de las asignaturas del Bachillerato que aprobó el Congreso. Finalmente, toda la oposición ha facilitado que la enmienda sobre Matemáticas se debatiera y votara, aunque luego algunos se han abstenido (143 votos a favor y 77 abstenciones).

El portavoz socialista de Educación, Vicente Alvarez Areces, ha destacado a la prensa la "buena voluntad" de su grupo para "paliar el desatino" del PP sobre esta materia y los "perjuicios" que iba a causar a miles de personas.

Se ha referido al "problema" derivado de que los bachilleratos de Humanidades y Ciencias Sociales se unificaron en el Congreso con una enmienda del PP, lo que suponía que el Latín era obligatorio y las Matemáticas, opcionales. Según el texto aprobado por el Senado, el Bachillerato de Humanidades y Ciencias Sociales tendrá dos itinerarios, de forma que quienes elijan Humanidades estudiarán Latín y los otros, Matemáticas aplicadas a las Ciencias Sociales.

Hasta llegar aquí, se ha sucedido un barullo de negociaciones desde el miércoles, cuando el ministro de Educación, José Ignacio Wert, confió, al intervenir en el Pleno, en que los grupos llegaran a un acuerdo para resolver la cuestión. El PP distribuyó en un primer momento una enmienda en la que esa modalidad de Bachillerato tendría dos itinerarios, el de Humanidades y el de Ciencias Sociales, y en éste último el alumno debería elegir entre dos grupos de materias de opción, que siempre incluirían Matemáticas.

Pero sería competencia de las administraciones educativas poder ofrecer o no los itinerarios.

Aunque el PP aseguró a los medios que la propuesta contaba con el respaldo de la Cámara, ni Foro Asturias ni PSOE, según fuentes de estos partidos, la firmaron.

Al senador de CiU Ramón Alturo tampoco le satisfacía porque implicaba una "especialización" de centros. Y el senador de Foro Asturias, Isidro Martínez, decidió no apoyar la tramitación de esa primera enmienda al sentirse "engañado" por el PP.