La Guardia Civil prevé tomar declaración en los próximos días a varias personas para determinar su grado de participación en las actividades del grupo detenido dedicado presuntamente a blanquear dinero de grupos criminales rusos en Lloret de Mar (Girona).

Según ha informado la Guardia Civil en un comunicado, la operación sigue abierta y tampoco se descartan nuevas detenciones en los próximos días.

Los cuatro detenidos pasarán este lunes a disposición del Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional, después de ser trasladados a Madrid este fin de semana.

Los arrestados --Andrei Petrov, su padre, una colaboradora y una arquitecta-- son sospechosos de formar parte de una red de blanqueo de fondos procedentes de organizaciones criminales rusas por un valor de 56 millones de euros en los últimos años.

Los detenidos han estado presentes en los registros realizados por el Servicio de Información de la Guardia Civil en sus domicilios particulares y sus lugares de trabajo, de donde se han incautado numerosa documentación.

En casa de Andrei Petrov han intervenido un fusil de asalto Kalashnikov, que será remitido al laboratorio central de criminalística.

La Guardia Civil también ha acudido al Ayuntamiento de Lloret con un requerimiento judicial para recopilar documentación que "permita completar la investigación", han indicado.

Blanqueo a través de paraísos

La actividad principal del grupo consistía en el blanqueo de capitales procedentes de Rusia, que, tras pasar por terceros países --algunos de ellos paraísos fiscales--, llegaban a España para realizar inversiones de tipo financiero e inmobiliario.

Este entramado, establecido en Lloret de Mar, está dotado de una clara estructura jerárquica cuyo cabecilla estaba en Rusia.

En la red en España, su principal responsable había creado una serie de empresas que, contando con la colaboración y asesoramiento de numerosas personas, se habían infiltrado en el tejido económico y social de la zona, realizando numerosas operaciones inmobiliarias y financieras e incluso esponsorizando clubes deportivos de la zona.

El grupo contaba también con sociedades y colaboradores estratégicamente ubicados en diversos países como Islas Seychelles, Chipre, Andorra, República Eslovaca e Islas Vírgenes, entre otros.

Los investigadores han detectado relaciones societarias con importantes organizaciones criminales de origen ruso como Solntsevskaya y Solomonskaya, así como algunos de sus líderes.

En concreto, los agentes tienen indicios que pueden vincular algunas de las empresas investigadas con Semion Mogilevich, uno de los diez delincuentes más buscados por el FBI.