Las autoridades estadounidenses están investigando la posible relación de bebidas comercializadas por la empresa Monster Beverage con la muerte de cinco personas que habían ingerido este refresco energético, que se caracteriza por incluir altas dosis de cafeína. La compañía ha sido objeto de una denuncia, presentada por la familia de una de las víctimas, Anais Fournier, de 14 años, que bebió dos latas de unos 700 mililitros de esta bebida energética, por lo que ingirió 480 milígramos de cafeína en menos de 48 horas, el equivalente a 14 latas de 350 mililitros de Coca Cola.

Los progenitores consideran que sufrió "una arritmia cardiaca debido a la toxicidad de la cafeína" de la bebida, agravando una dolencia de la menor, que padecía el síndrome de Ehlers-Danlos, una alteración genética que causa un defecto en la síntesis del colágeno. El abogado de los padres fundamenta la demanda en que el producto no advierte sobre los potenciales peligros de la bebida.

Monster es la bebida energética más vendida en Estados Unidos, con una cuota de mercado del 39%. La Administración de Medicamentos y Alimentos, anunció que analizará estas cinco muertes, registradas entre el 2009 y junio de este año, si bien no ha establecido un vínculo directo hasta el momento, según ha informado su portavoz, Shelly Burgess.