La crisis económica ha reducido el protagonismo español y europeo en Río+20. El Gobierno resolvió no obstante acompañar las políticas auspiciadas por la UE, en particular las que apuestan por la llamada "economía verde". Según el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, "hay que conseguir" que los países en desarrollo "entiendan" que las naciones desarrolladas no les están "poniendo dificultades" al exigirle una economía sostenible. "Hay una demanda de financiación por parte de las naciones en desarrollo y una situación económica por parte de los países desarrollados que obliga a ser muy precavidos en los compromisos", reconoció Ramos. España no se encuentra en condiciones de responder a esas peticiones. Por su parte, el ministro de Agricultura y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, pidió que otros países se sumen a la LifeWeb, la iniciativa que España desarrolla en asociación con el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma).