La Policía ha desalojado por completo a los indignados que ocupaban la Puerta del Sol y ha impedido el acceso a la plaza en una operación que ha comenzado a las 5 de la madrugada desafiando la prohibición de mantener la acampada.

Varias furgones de la Policía han cercado los acceso a la plaza tras desalojar a varias decenas de personas que pretendían pasar la noche tras la asamblea convocada por Toma la plaza que había durado hasta entrada la medianoche.

El desalojo ha provocado los gritos de los manifestantes contra los agentes y varios enfrentamientos. Dos policías nacionales han resultado heridos leves y un joven ha tenido que ser atendido por SAMUR Protección Civil, según fuentes de Emergencias Madrid.

Los dos agentes de la Policía Nacional heridos han sufrido "contusiones", mientras que el joven ha padecido una "crisis asmática" durante el desalojo de la Puerta del Sol.

La Delegación de Gobierno había impuesto como límite horario para la concentración las 22.00 horas, medida que fue desoída por las miles de personas que permanecieron en la Puerta del Sol a partir de esa hora. En el momento del desalojo, producido minutos antes de las 5.00 de la madrugada, aún permanecían en la plaza varias decenas de personas.

En el marco del desalojo, varias personas, que opusieron resistencia, fueron detenidas. Alguno de ellos permaneció durante varios minutos en el suelo y esposado con las manos en la espalda. Durante todo el proceso, la Policía ha procedido también a realizar numerosas identificaciones. La protesta se extendió a zonas próximas del centro de Madrid, como Gran Vía, Preciados, El Carmen, Montera o Arenal.

Según fuentes de los indignados, hay 18 detenidos que permanecen en la comisaría de Montera y no pasarán a disposición judicial hasta el lunes. Los indignados preveían volver a las actividades a partir de las 10 de la mañana de este domingo.

La plaza ha quedado abierta a las 9 de la mañana con la presencia de abundantes furgones policiales estacionados.