Un hombre de 28 años de origen magrebí se caló fuego a lo bonzo en la noche del lunes ante la comisaría de la Policía Local de Arbúcies (Selva). Los hechos sucedieron sobre las nueve de la noche, cuando el hombre se colocó ante las dependencias policiales con una garrafa de cinco litros en la que había una mezcla de gasolina y agua.

Tras rociarse con el líquido, el individuo se caló fuego. La rápida actuación de un agente de la Policía Local (que se quemó tres dedos) y de dos bomberos que en ese momento pasaban por el lugar de los hechos consiguió sofocar las llamas con celeridad. Aún así, el hombre quedó herido y fue trasladado a la unidad de quemados del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona.

Por el momento se desconocen las causas por las que el hombre se caló fuego. El Ayuntamiento de Arbúcies ha informado de que el herido vive en la población desde hace siete años y en los últimos meses ha pasado por una situación económica y familiar 'complicada', que se ha agravado a causa de una separación reciente 'traumática'.

El herido, cuyo nombre responde a las iniciales M.E., estaba casado con una española aunque ya no viven juntos. Desde hace un año no tenía trabajo y en los últimos meses carecía de un alojamiento estable.