El volcán submarino formado al sur de la isla de El Hierro, cerca del puerto de La Restinga, tiene ahora dos cráteres por donde expulsa magma. El principal, que se encuentra todavía a 120 de la superficie marina, y uno más reciente que se ha formado en la ladera hasta alcanzar una altura de unos 75 metros. Así lo han confirmado las mediciones efectuadas con el buque oceanográfico Ramón Margalef, del Instituto Español de Oceanografia (IEO). Al cono secundario le faltan unos 200 metros para aflorar sobre el mar.

El volcán, que tiene una base con un radio de 400 metros y una altura cercana a los 200 metros, apenas ha crecido cinco metros desde la última batimetría. No obstante, la actividad volcánica no ha cesado, sino que incluso se observa un incremento considerable del volumen de magma que emite, afirma María José Blanco, directora del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en Canarias. De hecho, continúa también el proceso de reactivación magmática a tenor de los parámetros de gases, deformación y sismicidad.

Terreno muy inclinado

Según los trabajos realizados, se deduce además que la emisión de material varía alrededor de la cima principal y que esa zona es el único lugar de toda el área prospectada en las diferentes campañas en la que se ha detectado actividad volcánica. Lo que sucede es que el volcán se sitúa en un terreno muy inclinado y ello provoca que los materiales expulsados acaben depositándose en zonas más profundas, más alejadas de la isla.

Estas han sido las principales conclusiones presentadas en la reunión del comité científico del Plan de Protección Civil por Riesgo Volcánico (Pevolca), celebrada en Santa Cruz de Tenerife con la presencia de científicos y autoridades locales.