El tratamiento terapéutico que se aplica a los menores con transtornos de conducta en los trece centros que existen en Andalucía tiene éxito en el cincuenta por ciento de los casos, según ha explicado la directora general de Infancia y Familias de la Junta, Teresa Vega. El 34 por ciento de los menores con ese tipo de trastornos acogidos cumple los 18 años antes de terminar con éxito el tratamiento, y con el 16 por ciento de los menores se fracasa, por lo que se culmina con éxito con el 50 por ciento restante.

Para atender a menores con transtornos de conducta existen en Andalucía 13 centros en las provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Málaga y Sevilla -hay en proyecto abrir otro en breve en la provincia de Granada o en la de Jaén- con un total de 148 plazas y 143 menores ingresados.

El 46 por ciento de los menores de entre 10 y 17 años que han pasado por estos centros han estado seis meses o menos, el 30 por ciento de 7 a 12 meses, el 13 por ciento más de 18 meses y el 11 por ciento de 13 a 18 meses. El 83 por ciento de los menores atendidos son españoles y, en el caso de los extranjeros suelen haber padecido problemas por consumo de drogas.

La edad más frecuente son los 15 años, seguida de la franja de 11 a 15 años y el 71 por ciento de los menores son varones, una desproporción que, a falta de un estudio científico que determine su causa. El origen de estos transtornos, según Vega, se encuentra en las pautas educativas en el desarrollo de la educación de los menores, que suelen proceder de familias "con discapacidad de normas educativas, o inconsistencia en la conducta coercitiva o que tienen una permisividad excesiva, que favorece conductas inmaduras".