El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, ha propuesto este jueves la celebración, el próximo mes de mayo en París, de una cumbre de las autoridades nucleares del G-20 (los países más desarrollados del mundo) para definir unas normas de seguridad nuclear internacionales.

Sarkozy ha planteado esta iniciativa a su llegada a Tokio, ciudad a la que ha viajado para reunirse con el primer ministro nipón, Naoto Kan, y expresarle su solidaridad y voluntad de cooperación con Japón tras el terremoto y posterior tsunami que el pasado 11 de marzo asoló la costa noreste del país y que causó graves daños ala central nuclear de Fukushima.

"Pedimos a las autoridades competentes de los países del G-20 que se reúnan, si es posible en París, para definir una norma de seguridad nuclear internacional", ha subrayado durante un discurso en la Embajada de Francia en Japón. "Es totalmente anormal que estas normas internacionales no existan", ha lamentado. Sarkozy es un firme defensor de la energía nuclear, que suministra el 80% de la electricidad en Francia.

El jefe del Elíseo ha expresado su "solidaridad" con las autoridades japonesas que se enfrentan a una grave crisis nuclear a raíz de los daños registrados en los reactores nucleares de la planta de Fukushima. Sarkozy ha alabado la "dignidad y el coraje" con que los japoneses están afrontando la catástrofe.

La visita de Sarkozy es la primera que realiza un jefe de Estado a Japón desde que ocurrió el terremoto coincide con la presencia en el país asiático de expertos de la empresa pública francesa Areva que han viajado a Japón para colaborar con la empresa Tepco, encargada de la gestión de la central de Fukushima, en las tareas de reparación de los reactores nucleares y de drenaje de las aguas contaminadas.