Entre los españoles que se encontraban en Japón en el momento del terremoto había un buen número de directivos de empresas españolas que exportan o fabrican en el país asiático. El seísmo pilló a Luis Lopezbarrena y Gonzalo Batista, ejecutivos de la compañía catalana Simon, en un restaurante de Tokio. "Lo más sorprende fue el ruido del edificio vibrando y la calma de los japoneses", explica Lopezbarrena. Después de participar en una feria, su odisea fue conseguir un vuelo de vuelta a Barcelona. Tardaron nueve horas en taxi en recorrer los 70 kilómetros de Tokio al aeropuerto de Narita, pero llegaron a tiempo para embarcar.

Simon busca abrir mercado en Japón, donde otras decenas de empresas españolas están instaladas. Las compañías con las que contactó este diario muestran cautela y estaban a la expectativa, ante la incertidumbre de réplicas y fuga radiactiva.

El Instituto de Comercio Exterior (Icex) tiene contabilizadas 34 empresas españolas en Japón, entre ellas compañías de moda (Adolfo Domínguez, Mango, Inditex) y agroalimentarias (Freixenet, Codorniu, Torres). En cuanto a la balanza comercial, España exportó 1.423 millones de euros en el 2010, frente a unas importaciones de 3.471 millones. Los principales sectores son el químico, los productos semifacturados, la tecnología industrial, la moda y la alimentación.

TIENDAS DE MODA La presencia de las textiles se basa en su red de tiendas. La catalana Mango ha cerrado dos de sus siete puntos de venta en Tokio. La compañía ha reducido al 70% sus remesas al país. "Seguro que a nivel de consumo nos afectará, la gente no estará de humor para comprar", afirmaba su director general, Enric Casi. Mientras que para Mango el mercado japonés no es prioritario (seis millones anuales, el 0,5% del total), para Lupo supone el 11% de sus ventas. El fabricante de bolsos también estimaba que las ventas caerán. Inditex, por su parte, ha cerrado una veintena de las 58 tiendas de Zara en Japón.

Hay empresas que han paralizado totalmente su exportación al país asiático, como el Grupo Balfegó de L´Ametlla de Mar, que tiene en Japón su principal mercado (45%), adonde envía semanalmente unos 35.000 kilos de atún rojo, informa Efe.

VINOS Y CAVAS El sector cava, que también tiene una importante presencia, es prudente. Freixenet posee una oficina en Tokio, que no ha resultado afectada. "Tenemos también unos cuantos importadores independientes, uno de ellos en la zona de Sendai la más devastada. Tenían cinco pedidos pendientes y solo han anulado uno, por lo que deben confiar en una pronta recuperación", explica la subdirectora de exportaciones, Montse Amat. Freixenet facturó 16 millones en Japón, informa Josep M. Berengueras.

Codorniu también tiene una delegación comercial en Tokio. La firma no ha hecho cálculos de cómo afectará la situación al mercado, lo mismo que Bodegas Torres. "Japón es nuestro 13º mercado. De momento no sabemos qué va a pasar, hay cierta preocupación pero confianza", explican fuentes de la empresa.

En el sector de la banca, BBVA y Santander tienen oficinas en Tokio, pero ambas entidades afirman que su actividad es pequeña, lo mismo que Pescanova y Mondragón.