La concreción de la propuesta de Pacto Social y Político por la Educación dada a conocer el miércoles por el ministro de Educación, Angel Gabilondo, no satisfizo al PP. Los conservadores habían trasladado al ministerio un documento --obviado finalmente en la propuesta-- en el que reclamaban que, en las autonomías con dos lenguas oficiales, se garantizase que el alumno podía cursar la totalidad de la enseñanza en castellano.

El vicepresidente de la Comunidad de Madrid y número dos de Esperanza Aguirre, Ignacio González, lamentó que en los planteamientos recogidos por Gabilondo no figuren "muchas cosas importantes", entre las que citó "el aprendizaje del castellano".

Los dirigentes del PP, con Mariano Rajoy a la cabeza, también echaron en falta aspectos importantes como la libertad de los padres para elegir la educación de sus hijos y el reconocimiento de los profesores como autoridad pública. No obstante, el portavoz de Educación en el Congreso de los Diputados, Juan Antonio Gómez Trinidad, constató que se está en pleno proceso de negociación.

La jerarquía católica avanzó ayer su opinión a través de la secretaria de la Provincia Eclesiástica de Madrid, María Rosa de la Cierva. La religiosa y miembro del Consejo Escolar del Estado criticó el silencio sobre la asignatura de Educación para la Ciudadanía, una materia contra la que el Episcopado mantiene una feroz oposición. El PP ha pedido que se elimine en Primaria, cambiar los contenidos en la ESO, y en Bachillerato, que se sustituya el nombre de Filosofía y Ciudadanía por el de Filosofía.