La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto fin a una de las multas más anacrónicas que existían en su normativa. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicará en los próximos días una orden ministerial que modifica el reglamento general de vehículos, del año 1998, con el fin de que no sea obligatorio llevar un juego de luces de repuesto en el coche.

El director general de Tráfico, Pere Navarro, ya pidió perdón en octubre del 2008 a los conductores, "víctimas de un desajuste", por la pervivencia de una sanción sin sentido, dado que la mayor parte de los faros de los vehículos modernos impiden el recambio de las luces sin ir al taller.

Navarro anunció el inicio de los trámites para eliminar la multa --que era considerada grave y se castigaba con 150 euros-- y, desde ese día, los agentes dejaron de multar por ese motivo.

Por tanto, la orden ministerial solo traslada a la legislación un cambio que ya se aplicaba. En el 2007, último año completo en el que se sancionó por este motivo, se interpusieron unas 13.000 denuncias.