El juicio por el asesinato del alcalde de Fago, Miguel Grima, concluyó ayer con una declaración final del único acusado, el guarda forestal Santiago Mainar, quien defendió su inocencia, reclamó Justicia y dijo que prefiere que le acusen de dar "muerte a un tirano que de ampararlo políticamente".

El juicio quedó visto para sentencia después de que el Ministerio Fiscal y las acusaciones particular y popular leyeran sus conclusiones definitivas, en las que mantuvieron su petición de 21 años de cárcel, por asesinato, atentado a la autoridad y tenencia ilícita de armas, al entender que las pruebas tienen la "fuerza" suficiente para solicitar una sentencia condenatoria.

"Yo no me matado a nadie, pero prefiero que me acusen de darle muerte a un tirano que de ampararlo políticamente, de resignarme como ciudadano", dijo Mainar, tras darle la palabra el tribunal.