Noticia actualizada. El alcalde de Polop de la Marina (Alicante), Juan Cano, del PP, ha sido detenido la pasada madrugada por su presunta implicación en el asesinato a tiros de su antecesor, el también popular Alejandro Ponsoda, en octubre del 2007.

El arresto, el séptimo con relación al crimen, ha causado estupor en la sociedad valenciana y "sobresalto" en esta pequeña población de poco más de 4.100 habitantes, a la espera de que se conozca su grado de implicación.

El alcalde fue detenido en su domicilio por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, quienes estuvieron "bastante tiempo" en su domicilio antes de trasladarle hasta los calabozos de la Comandancia del Instituto Armado, en Alicante.

No ha trascendido el posible papel de Cano en el crimen, ocurrido cuando era mano derecha de Ponsoda como primer teniente de alcalde y concejal de Urbanismo, ni tampoco se ha descartado que haya nuevos arrestos en los próximos días, toda vez que la operación sigue "abierta".

Tiroteado junto a su coche

El 19 de octubre del 2007, Ponsoda fue tiroteado a las puertas de su casa por uno o varios desconocidos, que le provocaron tres heridas muy graves por las que murió ocho días después en el Hospital General de Alicante, dejando dos hijas de 25 y 27 años.

Tras el arresto, los agentes disponen ahora de tres días de plazo para avanzar en la investigación antes de que Cano sea interrogado por la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Villajoyosa, que mantiene el secreto de las actuaciones.

Durante la mañana, la frase más repetida entre los palopinos ha sido "han detingut a l'alcalde" (han detenido al alcalde), aunque, a las preguntas de los numerosos medios de comunicación que han "invadido" hoy las calles del pueblo, las opiniones sobre la posible participación de Cano son muy diversas.

Por su parte, la primer teniente de alcalde y nueva alcaldesa en funciones, María Dolores Zaragoza, ha relatado que la población se siente "muy impresionada" por la noticia, ya que "no se lo esperaba nadie", aunque ha agregado que la actividad en el Ayuntamiento sigue siendo la habitual.

Acompañada del resto de equipo de gobierno, a excepción del concejal de Turismo, Joaquín Montiel, que ha aducido estar reunido, la alcaldesa en funciones ha leído un comunicado en el que pide que se respete la presunción de inocencia y en el que expresa el deseo de que se llegue "lo antes posible a la resolución del caso".

La ley se aplicará "a rajatabla"

Mientras tanto, la subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, ha afirmado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado trabajan para aplicar la ley "a rajatabla" con independencia de "quién se es", y no se ha pronunciado sobre si prevé nuevos arrestos porque la operación no está cerrada, aunque en todo caso no los cree inminentes.

Previa consulta al presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, el PPCV ha anunciado que suspende a Cano cautelarmente de militancia por unos hechos "tan importantes y tan graves", y el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, ha pedido que se depuren todas las responsabilidades.

La portavoz de la Generalitat Valenciana, Paula Sánchez de León, ha confiado en que se actúe con la "máxima agilidad, celeridad y rigor" para "esclarecer cuanto antes" el crimen y la supuesta implicación del alcalde.

Los últimos acontecimientos parecen acercar a su fin la investigación de unos hechos en los que no parecía haber avances durante dos años, ya que fue justo dos años y un día después de que Cano fuera elegido alcalde en sustitución del fallecido Ponsoda (el pasado día 3) cuando se detuvo al primer presunto implicado en el crimen.

Tras él, otros cinco arrestados como supuestos autores materiales o intermediarios, todos ellos ya en prisión provisional sin fianza, hasta llegar a Cano, que desde 2007 ha reiterado su deseo de esclarecer el asesinato del que fuera su compañero y líder político, con el que el PP ganó cuatro elecciones por mayoría absoluta.