La Policía Nacional ha liberado a la víctima de un secuestro en Zaragoza y ha detenido a los supuestos autores, tres ciudadanos de nacionalidad marroquí, cuando pretendían cobrar el rescate en un área de servicio de la ciudad.

Según han informado fuentes policiales, los detenidos solicitaban el pago de una antigua deuda de 3.270 euros contraída por el secuestrado. La víctima, natural de Marruecos, manifestó a los agentes que había temido seriamente por su vida.

La operación se inició cuando un ciudadano marroquí afincado en España comunicó a la policía que su suegra, residente en Marruecos, había recibido varias llamadas de una persona que se expresaba en árabe, en las que le comunicaban que su hijo estaba secuestrado y que le matarían si no saldaban la citada deuda.

LLAMADAS A FAMILIARES

La madre del secuestrado facilitó a los autores el teléfono de su yerno para que trataran directamente con él, y fue quien finalmente denunció los hechos a la policía, según las mismas fuentes.

El denunciante, antes de hablar con la Policía, recibió una llamada de los secuestradores en la que le hicieron saber que estaban dispuestos a matarlo si no satisfacía sus exigencias.

Durante esta conversación permitieron a la víctima hablar directamente con su familiar, quien le confirmó que era víctima de un secuestro.

Tras esta primera conversación, el pasado día 4 de octubre, se produjo una cita con dos de los secuestradores en la ciudad de Zaragoza, en la zona donde se celebró la Exposición Internacional, en la que le indicaron que si quería volver a ver vivo a su cuñado tenía que liquidar la deuda contraída.

MALETERO

Inmediatamente después, tras verificar la seriedad de las amenazas, se puso en contacto con la policía, que activó un plan de actuación con agentes de la sección de secuestros.

Los policías, que concluyeron que la deuda contraída podría tener su origen en una transacción entre narcotraficantes, establecieron un dispositivo para liberarlo y detener a los raptores.

El dinero se pactó entregarlo en un área de servicio cercana a la capital aragonesa, a la que acudieron dos secuestradores que fueron detenidos. El tercero les esperaba en un turismo en cuyo maletero descubrieron al secuestrado.