El Ministerio de Sanidad se plantea por primera vez ampliar la Ley Antitabaco para prohibir fumar en todo los lugares públicos, incluidos los bares y lugares de ocio, según avanzó ayer la titular de este departamento, Trinidad Jiménez. "Estamos preparados para plantearnos ampliar los términos de aplicación de la Ley", señaló la ministra, al ser preguntada, en una entrevista con Efe , por si estaba dispuesta a endurecer la normativa que entró en vigor en enero del 2006.

Sus palabras fueron recibidas con extrañeza en algunos sectores, máxime teniendo en cuenta que Jiménez se había pronunciado en distinto sentido hace un par de meses. "No endureceré la ley del tabaco esta legislatura. No es el momento de ello, sino de exigir su cumplimiento a todas las autonomías", declaró en una entrevista publicada el pasado 17 de mayo.

"FASE DE EVALUACION Pero ayer, Jiménez explicó que la Ley está en "fase de evaluación", para ver cuál es el grado de éxito en su aplicación, y ha agregado que lo siguiente será ampliar las áreas libres de humo.

La ministra reconoció que la Ley contra el tabaco produjo un efecto "muy beneficioso en su momento", ya que, al año siguiente de que se aprobara, habían dejado de fumar más de un millón de personas.

No obstante, considera que "en este momento" las autoridades sanitarias se han encontrado con que existen "muchas lagunas" en su aplicación, por un lado, y por otro, que "ése carácter disuasorio inicial no se ha completado". Jiménez subrayó que "la prohibición de fumar en espacios públicos se ha extendido prácticamente a todos los países europeos" y a algunos, como Turquía, que tienen "una tradición de consumo muy alto".

"Una vez que España ya puso en marcha su Ley y se aprobó la posibilidad de que determinados espacios públicos quedarán libres de humo --continuó--, creo que en este momento estamos preparados para plantearnos si hubiera que ampliar los términos de aplicación de la misma".

La ministra aventuró que esto contribuiría, "un paso más cada día", a acabar con la situación, por lo que mostró su voluntad de "seguir trabajando en esa dirección".

Las razones que esgrimió la titular de Sanidad para ampliar los espacios sin humo son que el tabaquismo es "un problema de salud pública" y que, además, es preciso velar por "el buen funcionamiento y el uso racional de los servicios sanitarios".

"Las personas que fuman utilizan más los servicios sanitarios y consumen más fármacos, lo que aumenta los gastos sanitario y el farmacéutico", aseveró.