A pesar de su viabilidad técnica, es más que probable que haya una reconsideración política del proyecto Constellation, que prevé la construcción de una base lunar. Lo afirma rotundamente Roger Launius, jefe de los historiadores de la NASA. "Puede haber un frenazo", admite Wendell Mendell, responsable científico de Constellation, "pero en la agencia he aprendido a esperar".

Las razones para dudar no faltan. El presidente Barack Obama ha encargado a un grupo de expertos revisar el presupuesto del proyecto de la NASA. En agosto harán su pronunciamiento. "El primer viaje a la Luna se hizo en el contexto de la guerra fría, como una exhibición de prestigio y de poder tecnológico frente a los soviéticos", recuerda Launius. "Ahora el contexto es muy distinto", añade.