El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha condenado al Institut Català de la Salud a indemnizar con 150.000 euros a una paciente a quien, a los 27 años, se le tuvo que extirpar un pecho porque no se le detectó a tiempo un tumor mamario en el Hospital Joan XXIII de Barcelona.

En la sentencia, la sala estima el recurso presentado por la paciente, al considerar probado que no se le dispensó la atención médica necesaria ni se le practicaron las pruebas adecuadas para detectarle a tiempo el tumor mamario.

La chica acudió al médico el 15 de febrero del 2000 al percatarse de la existencia de un bulto bajo el pezón de su mama derecha. A partir de entonces, comenzó una serie de visitas al citado hospital, sin que en el momento inicial del tratamiento los equipos médicos dieran importancia a la patología que presentaba.

Por este motivo, el tumor creció de forma desmesurada, de los 27 milímetros a los 7 centímetros, y acabó comportando la extirpación de la mama de la paciente, cuando, si se hubiera detectado a tiempo, podría haberse tratado con radioterapia y con una cirugía más conservadora.

Para el tribunal, "es evidente" que a la paciente no se le dispensó la atención médica necesaria, como lo demuestra el hecho "irrefutable, objetivo e incuestionable" de que el tumor fue creciendo de tamaño, a pesar de que la mujer asistía "desesperada" a la evolución del bulto.

La indemnización otorgada pretende compensar a la paciente por la pérdida del pecho, la necesidad de acudir a otros centros hospitalarios, el sufrimiento por las secuelas, el tratamiento de la quimioterapia y la limitación en el movimiento del hombro derecho.