Asociaciones pro eutanasia y expertos en cuidados paliativos consideran "un espectáculo bochornoso" la intervención del Gobierno italiano en el caso Eluana Englaro, mientras los grupos defensores de una muerte natural reclaman una investigación de las circunstancias que llevaron a su fallecimiento.

El presidente de Derecho a Morir Dignamente, Fernando Marín, ha trasmitido su alegría por haberse respetado la voluntad de la paciente italiana. "Eluana se encontraba en un estado vegetativo persistente y con posibilidades de recuperación prácticamente nulas que se alargó diecisiete años", ha explicado el presidente de comisión central de Deontología de la Organización Médica Colegial, Marcos Gómez.

"La alimentación y la nutrición pueden considerarse medidas desproporcionadas en una situación que se alarga tanto en el tiempo", dijo Gómez.