Los inmigrantes utilizan menos los servicios sanitarios que los españoles, excepto las urgencias, a las que acuden con mayor frecuencia los extranjeros de origen latinoamericano. Es la conclusión de un estudio presentado por la Fundación de Ciencias de la Salud y realizado con la información de las encuestas de salud de Cataluña (2006), Madrid (2005), Valencia (2006) y Canarias (2004).

Los españoles van más a la consulta del médico general y también a la de los especialistas, pero esta tendencia se invierte respecto al servicio de urgencias, que es utilizado con mayor frecuencia por los inmigrantes de América Central y del Sur.

El estudio destaca el escaso uso que hacen las personas de países de Europa del Este del médico especialista y el alto nivel de hospitalización en Madrid de los extranjeros de origen africano, principalmente marroquíes.

Las menores diferencias en el uso de los servicios sanitarios entre españoles e inmigrantes se dan en las consultas de médico general y hospitalización y las mayores en los especialistas y los servicios preventivos.

Expone que en líneas generales, las personas que emigran están más sanos que los que se quedan en sus lugares de origen, circunstancia que suele alargarse durante largo tiempo.

En un periodo de quince días, indica que en Madrid el porcentaje de población inmigrante que utilizó el médico general fue del 15,7 y española del 16,7%, mientras que en Cataluña fue el 9,9% y el 12,5 por ciento, respectivamente.

Según ha explicado el profesor de la Universidad Complutente de Madrid Enrique Regidor, director de la investigación, con los datos cruzados de estas comunidades se demuestra la menor frecuencia de la utilización de estos servicios por parte de los inmigrantes "al igual que ocurre en otros países".

Además, recordó que la población inmigrante procedente de países ricos presentan algunas diferencias, como la utilización con una frecuencia alta de los servicios de dentista