Desde que le dio la espalda al polifacético Ricardo Bofill hijo, la cantante mexicana más internacional, Paulina Rubio, está apostando muy fuerte por su carrera y se deja ver con todo su potencial artístico en cualquier acto que tenga proyección. La inquieta y menuda rubia asistió el jueves, en Miami, a la gala de los premios MTV, facción vídeo latino, y dejó con la boca abierta al personal cuando, en plena actuación, un accidente abrió totalmente su pequeño vestido dejando totalmente su anatomía posterior al descubierto, salvo el hilo del tanga de color rojo (foto). Ella, muy profesional, ni se inmutó y siguió con la actuación, porque, ya desde el primer momento, cuando llegó a la fiesta y posó para los fotógrafos, mostró parte de su lencería de color rojo, suficiente para ser la reina de la velada.

Paulina, supuestamente sin pretenderlo, ha logrado superar a su colega Janet Jackson, que también por casualidad dejó un pecho a la vista de millones de telespectadores de la Super Bowl, lo que originó el escándalo pezongate. Además, con su carnal actuación, Paulina se ha mostrado más atrevida que sus compañeras Christina Aguilera y Britney Spears, dos aspirantes a Madonna que equilibran picardía y canciones.