El buen tiempo parece haber llegado para quedarse, lo que permitió a la provincia disfrutar de un Jueves Santo cargado de emoción y devoción. Los seguidores de las hermandades salieron masivamente a la calle en todos los rincones de Córdoba para acompañar los desfiles procesionales en el gran día de esta Semana Santa de retorno a la normalidad, que se prolongó hasta la madrugada.
Lucena
Once pasos procesionales
Miles de lucentinos asistieron a las procesiones del Jueves Santo. El prólogo lo puso en la madrugada la cofradía y hermandad de Tambores Enlutados del Santísimo Cristo de la Salud y Misericordia (Cristo del Silencio), que partió de la parroquia de San Mateo. El Silencio impresionó, acompañado por los tradicionales tambores roncos enlutados. A media mañana, salía de la iglesia mayor de San Mateo Apóstol la Hermandad de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús de la Caridad y por la tarde, iniciaba su recorrido desde la monumental ermita trinitaria de Dios Padre, la Cofradía de la Santa Fe, Nuestro Padre Jesús en el Sagrado Lavatorio y Nuestro Padre Jesús Preso.
De la iglesia parroquial de Santiago Apóstol, partió la cofradía de Jesús Amarrado a la Columna y María Santísima de la Paz y Esperanza. Especialmente emocionante fue el paso de la Columna por la calle Flores, donde los santeros se tienen que emplear para que no roce los balcones de las casas. Detrás vendría la Cofradía de Jesús Caído y María Santísima de la Salud. Cerró el desfile la Hermandad del Cristo de la Sangre y María Santísima del Mayor Dolor. La imagen del Cristo de la Sangre fue traída desde Méjico en el siglo XVI mientras que la Virgen del Mayor Dolor es obra de Antonio Castillo Lastrucci. El desfile estuvo acompañado por la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús de la Columna y María Santísima de la O Gitanos de Málaga en la Cruz de Guía.
Cabra
Expiración y Piedad
El Jueves Santo egabrense empezó a brillar con la salida en la madrugada de la estación penitencial y el rezo del Vía Crucis del Cristo de la Expiración desde la Capilla de la Fundación Termens que, a hombros de sus hermanos porteadores, inició en silencio su recorrido. La jornada continuó con la Piedad desde la iglesia de la Asunción y Ángeles, donde este paso que representa el Santo Traslado al Sepulcro obra del imaginero Fernando Aguado y presidido por su titular mariana, procesionó junto a la banda de cornetas y tambores Los Gitanos de Málaga.
La tarde-noche se abrió también en la iglesia de la Asunción y Ángeles con el Preso, el Señor de las multitudes, que salió un año más a hombros de su cuadrilla de judíos acompañado por la agrupación musical Virgen de las Angustias de Cabra. A esta siguió la salida desde el mismo templo de Jesús Amarrado a la Columna y Azotes, con acompañamiento de la agrupación musical Jesús Despojado de Jaén y la Banda de Música Felipe Moreno de Cúllar Vega. La tercera de la noche fue Nuestra Señora de la Esperanza, que tuvo su salida en la parroquia de Santo Domingo de Guzmán junto a la banda de música Santa Cecilia de Pedroche. Por último, la Archicofradía de la Vera Cruz, la más antigua de las corporaciones penitenciales de Cabra, recorrió las calles tras su salida desde la iglesia de San Juan Bautista del Cerro acompañada por la Banda de Música Maestro Amador de Andújar.
Palma del Río
Cristo de la Expiración
Palma del Río se congregó en el atardecer del Jueves Santo en torno a la parroquia Arciprestal Nuestra Señora de la Asunción para recibir a la Hermandad del Santísimo Cristo de la Expiración, María Santísima de los Dolores, Santa María Magdalena y San Juan Evangelista. Con la majestuosa torre de la Asunción de fondo, la puerta del templo se abrió y la hermandad anunció su salida con la aparición de un muñidor, que invita a las tres reglas de esta cofradía: silencio, orden y devoción.
Seguidamente, cuatro Sagrados Titulares en un solo paso, un paso de misterio con el Cristo de la Expiración, la Virgen de los Dolores, María Magdalena y Juan Evangelista. El hermano mayor de esta histórica cofradía, nacida en el año 1758 y refundada en 1958, explica que hace 40 años ya hizo estación de penitencia en un solo paso, aunque también admite que hacen falta costaleros en una Semana Mayor en crecimiento. Una de las novedades de este año ha sido la incorporación en el recorrido de la alcazaba, conocida popularmente en Palma como Mesa de San Pedro, algo que ya hiciera hace 40 años. Unas obras en la calle San Juan obligaron a modificar el trazado para alcanzar la carrera oficial.
Bujalance
Santa Cruz y Jesús Rescatado
Bujalance vivió con buen tiempo el primero de los días grandes de su Semana Santa, declarada de Interés Turístico. Cientos de locales y visitantes se dieron cita en la Plaza de la Santa Cruz para disfrutar, tras dos años de amarga ausencia, de un Jueves Santo esplendoroso y de la Cofradía de la Vera Cruz en la estación de penitencia, con sus cuatro imponentes pasos: la Santa Cruz, Jesús en la Oración del Huerto, llevado a costal; Jesús Rescatado, portado a hombros por mujeres y Nuestra Señora de la Esperanza, también a costal en uno de los pasos de palio con dimensiones más grandes de Andalucía, acompañados por la Banda de Cornetas y Tambores del Imperio Romano, la banda de Música Pedro Lavirgen y la Agrupación Musical Municipal de El Carpio. Tras la salida del Rescatado, tuvo lugar la representación del Prendimiento. Después subió Judas al paso para dar el beso de traición al Rescatado y un soldado romano lo prendió atándole las manos. Finalmente, salió la Esperanza, la Señora de Bujalance, con gran expectación, ya que sale a rodillas de sus costaleros. En la calle, aplausos, vivas y saetas a la Virgen.
Montilla
Jesús Preso y Oración
En la recta final de la Semana de Pasión montillana, sobresalió el acto del Prendimiento, una singular muestra de la teatralidad barroca en la que destaca la figura bíblica de Judas. Ante la atenta mirada de centenares de vecinos, la imagen de Jesús Preso recibió el beso del apóstol traidor mientras los lanceros de la cofradía realizaban tres genuflexiones para escenificar el prendimiento de esta talla de Amadeo Ruiz Olmos. El cortejo de la hermandad de Jesús Preso, uno de los más coloridos de la localidad, se completó con el paso de la Oración en el Huerto, así como con el centenario Cristo de la Columna y el deslumbrante paso plateado de María Santísima de la Esperanza. Horas más tarde, el Cristo de la Misericordia volvía a expirar en el Llanete de la Cruz. La poderosa imagen que hizo brotar de la madera el tristemente desaparecido Francisco Solano Salido recorrió las calles de Montilla en unas andas junto a la efigie de María Santísima de la Amargura.
Fernán Núñez
Jesús Caído
La mañana del Jueves Santo se tiñó de rojo en Fernán Núñez para recibir a Nuestro Padre Jesús Caído, obra del fallecido escultor local Francisco Bonilla. La procesión de esta hermandad, la tercera en número de hermanos tras el Nazareno y el Calvario, comenzó en la iglesia de Santa Marina, con acompañamiento musical de la banda de cornetas y tambores sayones de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Pozoblanco. Ya por la tarde, con inicio en la iglesia de la Veracruz, salió en procesión Nuestra Señora de los Dolores y el Santo Cristo del Camino, hermandad que se refundó en 1948. Ambas imágenes procesionaron en un solo paso, formando un Stabat Mater. La banda de cornetas y tambores Pureza de Valladolid puso el toque musical al desfile.
Baena
Turba de judíos
La mañana del Jueves Santo estuvo protagonizada en Baena por la turba de judíos del Nazareno que participaron en las confesiones en San Francisco, rindiendo después homenaje a la figura del judío en la escultura de la plaza de la Constitución. La tarde se inició con la visita a los sagrarios que organiza la Agrupación de Cofradías en la que participan las distintas hermandades, centurias y las dos turbas de judíos, la colanegra y la colablanca. A las 20.00 horas, la Archicofradía de la Vera Cruz y Nuestro Padre Jesús del Prendimiento inició su estación de penitencia. Nada más salir, se llevó a cabo el Prendimiento de Jesús. Por primera vez, desfiló el Lignus Crucis mientras la imagen de San Juan procesionó tras su restauración y María Santísima de la Esperanza de San Juan fue custodiada por cuatro de sus hermanos, miembros de la Guardia Civil.
Peñarroya-Pueblonuevo
Jesús Nazareno y la Expiración
Peñarroya estrenó el Jueves Santo viendo salir al Nazareno, el Cristo de la Expiración y Nuestra Señora de los Dolores, un paso portado por costaleras y costaleros. El Cristo de la Expiración fue llevado por costaleros con traje minero al completo y acompañado por la Agrupación Musical Sierra del Castillo de Espiel. A las 20.00 horas, efectuaron su salida Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Esperanza de la parroquia Santa Bárbara, acompañados por la banda de música de Montellano. Una hora después, iniciaba su recorrido el Cristo del Amor y María Santísima de la Amargura junto a la Agrupación Musical Nuestra Señora de la Amargura de Peñarroya-Pueblonuevo.
Priego de Córdoba
Padre Jesús de la Columna
La jornada cofrade del Jueves Santo arrancó en la iglesia de San Francisco con la celebración por parte de la Archicofradía de Nuestro Padre Jesús en la Columna de cedido a la misma. Por la tarde, las veneradas imágenes de Nuestro Padre Jesús en la Columna y la siempre bellísima efigie de María Santísima de la Esperanza, así como la Santa Vera Cruz, origen de la actual archicofradía, iniciaban una estación de penitencia que contó con gran participación de hermanos. Entre los estrenos más destacados, destacan las nuevas túnicas del cuerpo de costaleros de Nuestro Padre Jesús en la Comuna, que estrenaba nuevos cordones de salida y la candelería de María Santísima de la Esperanza.
Fuente Palmera
Nazareno y Virgen de los Dolores
En Fuente Palmera, el primer gran desfile procesional de la Semana Santa lo protagonizó la estación de penitencia de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de los Dolores. El paso del Nazareno fue portado en andas como medida de protección frente al covid. La imagen de la Virgen, llevada a costal por mujeres y restaurada este año, lució un pañuelo de encaje de bolillos regalado por la pregonera, Rafaela Díaz.
Aguilar de la Frontera
La Esperanza y el Cristo del Amor
El Jueves Santo empezó en Aguilar con la visita a los sagrarios, que dio paso a la salida de Nuestro Padre Jesús del Calvario y Nuestra Señora de los Remedios Coronada de la Iglesia de la Veracruz. En la iglesia de la Candelaria, hizo su salida la Esperanza y el Cristo del Amor acompañados por los sones de la Banda de Música Sebastián Valero. Por último, partió de la parroquia del Soterraño el Padre Jesús de la Humildad acompañado por la Agrupación musical Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Roda de Andalucía.
Pozoblanco
Cristo del Perdón
La cofradía salesiana del Santísimo Cristo del Perdón, Nuestra Señora de la Amargura y San Juan Bosco recorrió las calles de Pozoblanco. Los nazarenos, de hábito negro y capa blanca, y las nazarenas, con peineta y mantilla. Decenas de personas se agolparon a las puertas de la iglesia de los salesianos para ver salir ambas imágenes con la luz de la tarde y entrar de madrugada. La banda de la Cofradía del Cristo del Perdón acompañó al paso del Cristo mientras la Virgen procesionó junto a la banda municipal de Dos Torres. Durante la noche, se pudieron escuchar saetas en la voz de Miguel Tena en la Plaza de la Constitución y en el Ayuntamiento.
Doña Mencía
La Columna
Doña Mencía vivió una jornada llena de emociones con la procesión del Silencio, La Columna y Nuestra Señora de los Dolores.
Alto Guadalquivir
El Huerto, la Humildad y el Prendimiento
Los municipios del Alto Guadalquivir vivieron con gran esplendor la llegada de los días grandes de la Semana Santa. Entre los momentos más emotivos, destacaron la salida del Imperio Romano desde la casa del comandante y la celebración del Prendimiento en una abarrotada plaza de El Charco. La Cofradía de la Veracruz inició su estación de penitencia con sus cuatro pasos (El Huerto, la Humildad, Ecce Homo y Nuestra Señora y Madre de los Afligidos) desde la iglesia de Santiago, para recorrer parte del casco histórico hasta la carrera oficial. Más tarde, salió la cofradía de la Flagelación de la iglesia del Hospital Jesús Nazareno para enlazar con la de la Vera Cruz en la plaza de El Charco. Una tarde espléndida, como también tuvo lugar en El Carpio, con la salida del Prendimiento y la escenificación en la plaza de Blas Infante, muy concurrida para disfrutar de este momento tan esperado tras dos años de pandemia. Pedro Abad también recreó la escena en una celebración declarada de interés turístico de carácter etnográfico mientras Villa del Río vivió momentos emocionantes con la salida de la Oración en el Huerto, un imponente paso seguido por decenas de penitentes. Villafranca asistió a la salida de Nuestro Padre Jesús, desde su ermita, y Nuestra Señora de los Dolores, desde la parroquia, con un emotivo encuentro a la altura del arco.
