Día de emociones, de miradas hacia el cielo con la esperanza de que la climatología nos dé una tregua y nos permita poder realizar Estación de Penitencia y dar testimonio de fe por las calles de nuestra ciudad.

Son las seis y cuarto de la tarde, se oyen tres golpes fuertes y secos en la puerta de la capilla y se hizo el silencio. Por fin la cofradía está en la calle, a los pocos minutos sale el Nazareno por la puerta, con la cruz a cuestas, minutos después, su madre, la Nazarena, con la mirada al cielo y rostro de dolor. Ya está en la calle, los hermanos de la cofradía ya están realizando su Estación de Penitencia, orando y rogando a sus titulares que velen por ellos y les protejan.

Este año, los hermanos de la cofradía estamos viviendo unos días llenos de alegría, ya que el próximo 7 de abril, en la Santa Iglesia Catedral, se beatificará al Padre Cristóbal de Santa Catalina, donde el Nazareno estará presente, presidiendo el Altar Mayor.

La cofradía tiene previstas dos salidas extraordinarias, una el día 5, a las 21.00 horas, desde su capilla con destino a la Catedral y cómo no, el día 7, tras la beatificación junto con los restos del Padre Cristóbal.