En España, la legislación reconoce desde 2018 el derecho a la desconexión digital. Pero a pesar de ello, el 74% de los trabajadores españoles confiesa que responde llamadas o correos durante las vacaciones. Una práctica que con el teletrabajo se ha normalizado, pero que puede acarrear importantes consecuencias para la salud. 

“El cambio de temperaturas y el cansancio de todo el año nos afecta física y anímicamente. Por eso, y para lograr reponer pilas, debemos desconectar de la rutina digital en la que nos vemos inmersos en el trabajo”, apunta Mónica Ureta, psicóloga del Hospital Vithas Madrid Arturo Soria

El no hacerlo provoca según esta experta la cronificación de síntomas como: 

“En verano es fundamental romper hábitos no solo laborales sino de nuestra rutina digital ya que esta es la manera en la que nuestro cuerpo y cabeza descansen. Si no lo hacemos, a la larga esto nos va a provocar una serie de síntomas como agotamiento, cansancio físico y emocional, fuertes dolores de cabeza al estar expuestos a pantallas constantemente e incluso vista cansada”.

Agotamiento, dolor de cabeza o vista cansada son algunas de los problemas que puede provocar la falta de desconexión digital durante las vacaciones.

¿Por qué nos cuesta desconectar de los dispositivos móviles?

En cuanto a por qué nos cuesta tanto desconectar en vacaciones, Mayra Mayor, psicóloga sanitaria de Vithas Las Palmas, apunta a que se debe al uso excesivo que hacemos de la tecnología en nuestro día a día. 

“Es común escucharnos decir “me voy de vacaciones, necesito desconectar”, pero la realidad es que no terminamos de desconectar y en consecuencia tampoco de descansar. Irnos de vacaciones y llevarnos todo tipo de herramientas digitales es sinónimo de no estar tan presentes allá donde vayamos a ir”, subraya esta experta.

Y es que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el uso excesivo de las tecnologías o Internet tiene la misma consecuencia que una droga y su utilización continuada y exagerada tiene el mismo efecto en sus cerebros que algunas sustancias como la cocaína y la heroína. 

“El uso desmesurado de internet, móviles u ordenadores puede conllevar que la persona pierda poco a poco su capacidad de gestionar el tiempo de uso y acabar generándole un malestar significativo, incluso síntomas de estrés y ansiedad, si no puede hacer uso de ellos”, señala Mayra Mayor.

Desconectar de nuestra rutina digital permite que nuestro cuerpo y cabeza descansen.

Cinco pautas para desconectar del mundo digital

Con el fin de conseguir esa desconexión digital tan deseable durante las vacaciones, la psicóloga Mónica Ureta, facilita las siguientes pautas que nos ayudarán a lograrlo:

  • Lo primero es tener voluntad de hacer. Desear realmente desconectar ya que si no siempre encontraremos una excusa para no hacerlo. 

“Cuando tomo conciencia y adquiero el compromiso de hacer una limpieza digital, eso puede suceder. Si no tomo esa conciencia voy a volver a caer”, advierte esta experta.

  • Poner objetivos medibles del uso que voy a hacer de la tecnología durante las vacaciones. Existen herramientas para medir el tiempo que pasamos ante las pantallas, de tal manera que podemos utilizarlas para reducirlo. 
  • Informar en el ámbito laboral que no estaré disponible.
  • Usar el “Fuera de la Oficina” o” Out-Of-Office” nos ayudará a rebajar la tensión de no contestar a los emails.
  • Y probablemente lo más difícil, intentar, en la medida de lo posible, tener apagado el móvil del trabajo durante las vacaciones o restringir las llamadas al personal.