COLESTEROL

Descubren la mejor forma de preparar las espinacas para bajar el colesterol

Las espinacas son uno de los mejores aliados contra el colesterol, ya que ayudan a eliminarlo

Así hay que preparar las espinacas para bajar el colesterol la mejor receta

Así hay que preparar las espinacas para bajar el colesterol la mejor receta

El colesterol 'malo' o LDL es uno de los principales problemas de salud pública en España: esta patología, que sufren más de 13 millones de personas en nuestro país, puede provocar graves enfermedades cerebrovasculares que empeoran notablemente la calidad de vida de la ciudadanía y que, además, tienen un alto coste para el sistema sanitario.

Una de las principales recomendaciones de los médicos para controlar el colesterol es, además de reducir el consumo de grasas trans y alimentos ultraprocesados, incrementar el consumo de frutas y verduras, en especial verduras de hoja verde.

Las espinacas, el gran aliado contra el colesterol

Las espinacas son una de las aliadas más potentes para controlar el colesterol, ya que ayudan a eliminar el colesterol en dietas muy ricas en grasa al ser eliminadas a través de las heces.

Además de ayudar a eliminar el colesterol, las espinacas tienen un alto porcentaje de esteroles y estanoles que favorecen una menor absorción del colesterol por nuestro cuerpo. También favorece la regulación de la presión arterial y es ideal para consumir durante el embarazo por su alto contenido en ácido fólico y su capacidad antianémica.

La mejor forma de comer espinacas para reducir el colesterol

La espinaca se puede consumir de múltiples formas: desde comer la hoja completamente cruda y lavada en ensaladas. Otra forma de introducir las espinacas como ingrediente en nuestra dieta es a través de sopas y guisos o batidos y bebidas naturales.

Según explica Laura Girona, dietista y nutricionista Colegio de Dietistas-Nutricionistas de Cataluña (Codinucat) a Cuidate + es recomendable ingerir las espinacas "al vapor, microondas, rehogado o salteado" de forma que se conserve su riqueza nutricional evitando hervirlas, cocerlas o guisarlas con mucha agua.

La mejor forma de preservar la vitamina C y los folatos de las espinacas, según explica Laura, sería comerlas crudas, ya que "si las cocemos, minerales como el calcio, el hierro o el magnesio se absorberán mejor; sin embargo, perderemos gran parte de las vitaminas. Cuando las cocemos en agua abundante podemos aprovechar el agua de la cocción como base para un caldo de verduras".