Quinto año

José María Bellido cierra su quinto año al frente del Ayuntamiento de Córdoba con la estabilidad como seña de un gobierno que respira los aires dóciles de las mayorías absolutas y que ha adornado la gestión con una gran cita en el calendario del 2024: la celebración en septiembre del 17º Congreso de la Organización de las Ciudades del Patrimonio Mundial (OCPM) con el telón de fondo de las efemérides patrimoniales de la Mezquita-Catedral y el Casco Histórico. 

El dirigente popular, que ya ha expresado su intención de concurrir de nuevo a las elecciones municipales en 2027, sigue centrando sus esfuerzos en el desarrollo logístico de la ciudad con la referencia de la Base Logística del Ejército, que empieza a tomar forma, y con la puesta en carga de 2,75 millones de metros cuadrados de suelo industrial. El aeropuerto vivió en verano el regreso de los vuelos comerciales, aunque continúa necesitando una oferta estable para el resto del año en momentos en los que el turismo ha recuperado ya por completo los datos de la prepandemia. El alcalde anunció un cambio que afectará de lleno a este sector: la suspensión de nuevas licencias para apartamentos turísticos en los zonas más tensionadas, los distritos Centro y Sur. 

La estabilidad no evitó que Bellido tuviera que enfrentarse a una crisis de gobierno, en la que resituó a un hombre clave de su equipo al frente de Presidencia, Miguel Ángel Torrico, y movió el tablero de sus concejales después de asuntos polémicos como la celebración de verbenas en el casco que terminaron convertidas en un macrobotellón. En el debate sobre el estado de la ciudad, el alcalde se puso tareas para los próximos meses como la de cerrar el estadio del Arcángel o reformar Ollerías y Gran Vía Parque. 

En la oposición se alza con voz singular el socialista Antonio Hurtado, el dirigente que más hostiga al PP acusándolo de practicar una política de pan y circo, de abandonar los barrios y la periferia (el INE vuelve a situar en Córdoba tres de los 15 barrios más pobres) y de no promover una política de vivienda pública que permita a los más jóvenes acceder a este mercado.

Suscríbete para seguir leyendo