Más tiempo para la reflexión. El Córdoba Futsal aborda esta semana su segundo parón liguero en apenas tres jornadas del calendario, también motivado por compromisos internacionales, con un nuevo período de inactividad que deja a los de Josan González con espacio para recapacitar, pulir conceptos y volver entonados tras un arranque que está teniendo de todo, excepto victorias. Ciertamente, tras saldar el primer arreón en la agenda del nuevo curso, la renta se presume algo escasa dadas las buenas sensaciones cosechadas durante diversas fases, que dejan un único punto alojado en el casillero, correspondiente al pasado empate en el derbi andaluz frente al Jaén en Vista Alegre (3-3), donde volvió a escaparse el ansiado triunfo por milímetros.
Lo que llega, no obstante, es ahora ese escenario lícito para revertir rachas, recuperar efectivos de la enfermería y, lo más importante, cimentar las bases de una nueva dinámica en Liga, que será necesaria para exprimir el potencial del renovado bloque califa en su temporada más ambiciosa hasta la fecha, que tan solo ha empezado y a la que le quedan múltiples capítulos por escribirse, a cada cuál más duro que el anterior. La próxima parada tras el parón, siguiendo esta línea, será a su vez otra prueba de fuego, con nada menos que la visita al poderoso Palma Futsal, que ya aguarda pacientemente en Son Moix.
Un calendario durísimo
Los primeros pasos del Córdoba Futsal en su cuarto curso consecutivo en la máxima categoría le han deparado un trance poco sencillo, con hasta tres compromisos ante rivales de gran complejidad para abrir boca en una temporada más competida que nunca. Empezando por el Noia (4-5) -un falso recién ascendido, que ya se parte situado en el grupo cabecero de la clasificación-, siguiendo por la visita a todo un Barcelona Futsal campeón de Liga y de Europa en el Palau (6-4), para terminar guerreando en este último cruce ante el siempre rocoso Jaén Paraíso Interior, en Vista Alegre (3-3), donde la dureza que impera en la Primera División esta campaña 2022-2023 quedó por enésima vez patente.
Sin duda, lo de los de Josan González ha sido una batalla tras otra hasta el momento, como único preludio y reflejo de lo que queda en el horizonte, donde esperan otra retahíla de enfrentamientos ante adversarios de alto calibre. Tras rendir cuentas ante el propio Palma Futsal, en tierras insulares, llegará la visita del Real Betis, seguido por la salida ante el Xota y la recepción a otro gallito de la categoría como el Jimbee Cartagena, cruces poco accesibles en los que no quedará otra que seguir sumando para mitigar el lastre de un arranque algo menos productivo de lo esperado, a la par de complejo, que sitúa al equipo codeándose con el farolillo rojo junto a unos sorprendentes ElPozo Murcia y Ribera Navarra.
Las continuas lesiones
Si la dureza del calendario ha sido determinante de cara al arranque liguero, los esquemas de Josan González también han sufrido un revés tras otro en lo referente a la parcela de las lesiones, con una enfermería rozando el aforo máximo tras encontrar las figuras de Zequi, Jesulito, Lucas Perín y Pablo del Moral como inquilinos, todos pilares fundamentales dentro del sistema del pontanés. Durante la pasada jornada, sin ir más lejos, la convocatoria del equipo estuvo que ser confeccionada sin la presencia de los tres primeros, mientras que el último, el cierre madrileño, tuvo que salir entre algodones por segundo encuentro consecutivo tras una acción dolorosa frente al Jaén, que ahondó la escasez de efectivos.
De esta forma, el choque ante el Noia se sitúa como único precedente en el que buena parte de la plantilla estuvo disponible a las órdenes de su técnico, también como única ocasión del curso en la que todas las líneas han estado completas, salvando la excepción de Álex Viana. La demarcación de los pívots, por otro lado, también está siendo la única intacta en cuanto a molestias, con Alberto Saura, Muhammad e Ismael como estandartes de un “grupo sano” cada vez más reducido. Miguelín, así mismo, no se libró de la criba y salió a su vez dolorido de otro de los lances del pasado choque ante el cuadro jiennense.
El “caso Álex Viana”, aún abierto
El gran borrón de los primeros compases de temporada para la escuadra blanquiverde lo está protagonizando curiosamente un futbolista que no se encuentra con la plantilla, el propio Álex Viana, con el brasileño todavía fuera de la dinámica del equipo desde el término de la temporada 2021-2022, sin haber realizado la precampaña junto al bloque, ni un entrenamiento, ni por supuesto ningún encuentro de Liga hasta el momento, a diferencia del resto de futbolistas brasileños de la categoría. Su ausencia, de igual forma, también se echa en falta durante un inicio liguero en el que la aportación del paulista, máxime tras la oleada de lesiones, se antoja totalmente imprescindible, tras ser una de las piezas más destacadas del anterior curso con seis goles en 28 partidos disputados.
Ante tal situación, la entidad presidida por José García Román, visiblemente preocupada por la situación que atañe al jugador, manifestó recientemente que la ausencia del ala se debe expresamente a temas burocráticos, pendientes de una resolución que debería ser prácticamente inminente. “Se han dado una serie de circunstancias que nos están retrasando. Esperemos que en el plazo de dos semanas esté con nosotros. Son cuestiones burocráticas todas, no hay ningún otro problema”, confirmó el propio dirigente, durante el acto de reafirmación de la alianza entre el equipo y el Ayuntamiento de la pasada semana.
La irrupción de los canteranos
Una de las grandes notas positivas de los tres primeros lances del calendario, por otro lado, está siendo la indudable irrupción de los talentos de filial, que ganan terreno con el amplio parte de lesiones, con miras a labrarse un hueco en el entramado de Josan González en un futuro próximo. Esa es una situación en la que actualmente han tomado partida futbolistas como Iván Gemes, autor de un gol ante el Jaén, Joaquín, Álex Bernal y Rafalillo, actuando como estandartes de toda una hornada de jugones que llaman a la puerta, insistentemente, de cara a las convocatorias de la primera plantilla, para las que acumulan méritos.
Ciertamente, Josan González ha demostrado y reafirmado una y otra vez que no es uno de esos técnicos a los que les tiembla el pulso a la hora de ofrecer alternativas a las joyas incipientes de la cantera blanquiverde, como ya hizo durante el pasado curso con el propio Álex Bernal, Víctor Areales, Pedro de la Cruz o Nano. En esta campaña, su filosofía de oportunidades no ha cambiado un ápice, dando nuevamente protagonismo a las perlas del cuadro dependiente que también brillan ya bajo el manto de la frenética Segunda B.
Alberto Saura, desencadenado
En un arranque de Liga tan turbulento, una figura se está creciendo sobremanera bajo el único oficio que conoce: el de hacer goles. Es una premisa que Alberto Saura está cumpliendo a la perfección durante este inicio liguero, en el que su aportación ofensiva comienza a recordar a la vista en su mejor momento, cuando sus goles fueron capaces de llevarlo incluso a las filas de la selección española absoluta. El matador de Vista Alegre acumula ya cuatro dianas con su firma, correspondientes al hat-trick ante el Noia y su posterior diana anotada frente al Jaén, que lo sitúan como el segundo máximo artillero de toda la Primera División, junto a Prestjord Terry, del Ribera Navarra, únicamente por detrás la media decena que actualmente ostenta Lucao, ala-cierre del Jimbee Cartagena.
La mejor versión del unionense será, innegablemente, un activo mayúsculo para los altos objetivos fijados por el Córdoba Futsal este curso, en el que desde el inicio se han confabulado toda una amalgama de notas positivas y negativas para ofrecer un único mensaje claro: este equipo tiene potencial. El parón liguero, de esta forma, vendrá de perlas a una escuadra que necesita de ese espacio de tiempo para reformular su trabajo, así como recuperar efectivos y edificar un nuevo talante de cara al regreso al circuito doméstico.
