Un año después de la efeméride del centenario de la fiesta de los patios, eclipsado por las limitaciones impuestas por la pandemia, Córdoba sigue conmemorando el aniversario con algunas citas culturales como la celebrada este martes en la Casa de las Campanas, bajo el título Cien años... no son nada. Este espectáculo, que vio la luz el verano pasado dentro del ciclo de Cultura en Red, volvió a subir el telón en un patio con la misma intención con la que se creó, hacer memoria sobre la historia pasada y reciente de esta fiesta popular y poner el foco en la vida de sus protagonistas, las mujeres.
Dirigido por el historiador Gonzalo Herrero, el espectáculo muestra el papel silencioso de las mujeres como cuidadoras aderezado con la música que en los años 50, 60 y 70 sonaba en estos espacios y cómo ha ido evolucionando la fiesta a través de los años. Todo ello, a través de la hija de una emigrante, que encarna Jennifer Castro, y que regresa a los patios tras años de exilio donde se reencuentra con los aromas y los colores de su infancia, que la transportan a otro tiempo. Junto a ella, estuvieron Estrella Terrón en danza española, Inma de la Vega al cante, Nicolás Díaz a la guitarra, Ana Rosa Dávila al violín y Daniel Morales Mawe con la percusión.
El patio de las Campanas se abrió este martes hasta completar aforo a quien quiso entrar y este miércoles por la noche, a partir de las 22 horas, volverá a hacerlo para la representación de enGalanadas, un montaje músico poético que rinde homenaje al escritor Antonio Gala. La actriz Irene Lázaro, acompañada por Manuel Molina al piano, Manuel Luque a la percusión, José Salgado al bajo y Lucía Nevado en danza pondrán vida a la idea original y voz de May López.
Quien quiera seguir profundizando en la fiesta y sus cien años también tiene la oportunidad de hacerlo hasta el domingo en el cine Delicias (calle Frailes), que además de ser punto de información sobre la fiesta declarada por la Unesco Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, estos días acoge la exposición Córdoba es patio.
Con el turismo en pleno apogeo y el calor en su punto máximo, las visitas a los patios siguen creciendo y este lunes se contabilizaron casi 62.000, 20.000 más que el martes pasado, día de la inauguración. El Alcázar Viejo sigue siendo la zona más transitada por los turistas seguida por Santa-Marina y San Agustín y por San Lorenzo. Los patios del entorno de Regina y Realejo son los menos visitados, por si alguien quiere aprovechar para recorrerlos sin colas ni aglomeraciones.
