Palma del Río tiene la imperiosa necesidad de poner en valor su excepcional conjunto patrimonial, que nos da identidad. Afortunadamente ha llegado el momento de recuperar un recinto histórico que lamentablemente ha pasado desapercibido a una gran mayoría, incluido vecinos que nos hemos acostumbrados a convivir junto o dentro de una muralla medieval sin reconocer que "se trata de una joya de nuestra historia".
Palma no ha sabido defender su legado histórico, ahora su recuperación tiene que ser un esfuerzo común, un proyecto de ciudad que nos defina como palmeños dentro y fuera de nuestros límites. Sin duda alguna, será la historia quien valore con exactitud este ambicioso proyecto de recuperación del patrimonio y dictará si Palma supo respetar esta gran inversión cultural y económica.
