Todos los agentes, trabajadores, empresarios, sindicatos, políticos, responsables de la Administración y vecinos coinciden al afirmar que la tan esperada campaña de la naranja va a ser "complicada". Las razones de tal coincidencia están en que muchas familias viven gracias a la naranja, muchas empresas viven gracias a la naranja, pequeño comercio vive gracias a los sueldos de la naranja, y Palma tiene su gran pilar económico en el campo, en la naranja. Cada año muchos hombres y mujeres, recolección y almacén, esperan como agua de mayo el inicio de la campaña citrícola y este año más ante el número de parados. Una realidad que exige la responsabilidad de todos: empresarios, trabajadores, sindicatos, políticos, Administración y vecinos, una responsabilidad común por el bien común y bajo criterios de legalidad.