Opinión | Paso a paso

Igualdad, equidad y justicia social

«Es obvio que si corregimos las desviaciones estructurales del sistema, se podrán crear soluciones sostenibles para alcanzar la plena inclusión»

Por desgracia, la política de los políticos, salvando algunas excepciones, ha dejado de tener esa función pedagógica que se supone que debería de ser inherente así misma. No es que sea la función principal de la política hacer pedagogía, pero sí que debería de ser una de sus consecuencias lógicas, pues un buen político cuando, por ejemplo, habla de igualdad, equidad y/o justicia social no solo debería de quedarse en el estereotipo, el eslogan, el símbolo, sino que debería ir más a la esencia, para que los ciudadanos identifiquemos mejor la realidad y comprendamos qué políticas son necesarias pergeñar para solucionar problemas. Por supuesto, el concepto más manoseado es el de igualdad. De hecho, es el más repetido en proclamas, discursos, manifiestos y toda clase de medios de difusión política y social. Sin embargo, hay otros términos menos nombrados, explicados y tenidos en cuenta que forman parte integral del progreso social. Estos son la equidad y la justicia social. El principio de igualdad tiene como objetivo garantizar que todas las personas obtengan los mismos recursos para poder disfrutar de una vida plena. Sin embargo, estos mismos recursos distribuidos uniformemente y bajo las mismas normas no cubren las necesidades diferentes de cada persona. Aquí se establece el principio de equidad. Este implica comprender la realidad y circunstancias sociales e individuales de cada persona, para brindarle a cada uno lo que necesita para disfrutar de una vida plena. Pero la igualdad y la equidad necesitan otra pata y es la justicia social. Es obvio que si corregimos las desviaciones estructurales del sistema, creando entornos inclusivos, y se ayuda a todas las personas a desarrollarse y a participar activamente en la sociedad, valorando la diversidad, se podrán crear soluciones sostenibles que nos ayuden a alcanzar la plena inclusión. La igualdad queda muy bien en los discursos pero necesita de la equidad y la justicia social.

*Mediador y coach

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