Este domingo, no solo Extremadura pondrá sus ojos en dos municipios de la provincia de Badajoz, Don Benito y Villanueva de la Serena. La fusión que votarán sus vecinos trasciende la frontera extremeña porque es una lección de buena política y democracia para todo el país, en unos momentos donde la política vuelve a dejar un espectáculo bochornoso, más digno de un serial televisivo que de la vida real.

Mientras por desgracia ya estamos acostumbrados a este comportamiento político barriobajero, llegan dos pequeñas ciudades extremeñas, Don Benito, con algo más de 37.000 habitantes y Villanueva de la Serena, con cerca de 26.000, para mostrar que la política de consenso es posible y que, cuando se quiere el bien del pueblo, las siglas no pueden ser un obstáculo.

Sus dirigentes están siendo un espejo donde mirarse porque se han unido en un proyecto de fusión, pero sobre todo, porque su intención no ha sido imponer sino dar participación, palabra y decisión a los ciudadanos que les votaron y les pusieron al frente de sus ayuntamientos. Por eso, el referéndum que tendrá lugar este domingo, 20 de febrero, es un balón de oxígeno para la democracia, un ejemplo de buen hacer y además, el proyecto está suponiendo un punto extra para ambas localidades, que se hable de ellas, que se hable de Extremadura y, lo que es mejor, para bien.

Porque estamos acostumbrados a ver casos de independentismo, léase el Brexit del Reino Unido o la situación en Cataluña, pero no a ver ejercicios de unidad. En esto hay que resaltar que la fusión conlleva un ejercicio de generosidad por ambas partes, de cesiones a favor del bien común que no todos están dispuestos a asumir. Por eso, Don Benito y Villanueva son un espejo en el que mirarse, porque devuelven la fe en la política y la democracia.

Distintos partidos políticos se han puesto de acuerdo -en sus ayuntamientos hay miembros del PSOE, PP, Ciudadanos, Unidas Podemos-IU y un concejal no adscrito-, tres expresidentes, del PSOE y el PP, han dado su apoyo a la unión, el sector empresarial también. Ya solo queda por ver qué deciden sus habitantes. Cerca de 9.000 han ejercido ya su derecho al voto por anticipado. Se necesita un 66% de apoyos para que salga adelante y todas las miradas están puestas en dombenitenses y villanovenses. ¿Qué decidirán? 

* Periodista