Define nuestra RAE el término «alegato» como argumento, discurso, etc., a favor o en contra de algo o de alguien. Escrito en el que el abogado expone las razones que sirven de fundamento al derecho de su cliente e impugna las del adversario.

He querido no complicar el nombre genérico de este rinconcito que el Diario CÓRDOBA ha tenido a bien reservarme y llamarlo como lo que es: un argumento a favor o en contra de cualquier suceso de actualidad, ya sea social o de la mía de andar por los juzgados.

Evidentemente, no espero que mi alegato sea compartido y guste a todos, pues desde aquí no me dirijo a ningún juzgador togado y con puñetas del que espere una sentencia favorable y, ya puestos a pedir, la condena en costas. Es más, sería bastante aburrido y decepcionante que quien me lea comparta mi opinión. Mi máxima es que quien no genera polémica no existe y yo vengo con ganas de competir, en las tertulias de barra o en las sobremesas, con la variante ómicron, con el exjefe del CNI y con la inmunidad de Puigdemon -la del TGUE, no la del covid, que este último no sabe ni conoce de países ni ‘països’-.

Realizada la presentación oportuna, paso a explicar el título de mi artículo de hoy, «Suplico al Juzgado». Las tres palabras que conforman la frase que me atrevería a afirmar, es la más repetida en mi vida profesional. La otra es «impagados».

Aunque parezcan cosas diversas y sin ninguna conexión entre ambas, ¿qué tendrá que ver el Petitum de una demanda con los Honorarios pendientes de cobro? Dirán ustedes, pues yo se lo voy a intentar explicar.

El abogado no trabaja a resultados. El 75% del trabajo de un letrado está en la redacción de la demanda, -que no es un «papelito» por el que usted quiere cobrarme-. No todos los órdenes jurisdiccionales llevan condena en costas en primera instancia, con lo que cada litigante se paga su defensa. El WhatsApp no es modo idóneo de consultas, ni para enviar pruebas a su letrado, que puede borrarlas junto a cualquier otro archivo incómodo, o incluso equivocarse al descargarla, bajarse el archivo incómodo y enviarlo por LexNet numerado y foliado bajo el nombre «prueba sonora». Y sobre todo y ante todo, si los juzgados llevan un retraso en los señalamientos de tres años, y hasta esa fecha Ud. no va a poder obtener una sentencia, sepa que su abogado ya ha hecho todo lo que a él se le exige, incluso ha Suplicado al Juzgado dicte Sentencia estimatoria a sus pretensiones.

¡No le haga llamarle mil veces para recordarle la provisión de fondos que le solicitó, que bien está Suplicar al Juzgador pero ni imaginarse puede lo mal que se pasa teniendo que mendigar el precio de tu trabajo al Justiciable!

*Abogada laboralista