¿Cuántas veces tendrán que manifestarse los ganaderos, los agricultores, las mujeres y los hombres del campo, los productores de leche, de carne, de cereales, de aceite, de vino, de frutas y verduras, reclamando la atención del ejecutivo a los efectos de la defensa de sus solicitudes, atosigados por el incremento del coste de la energía y producción, y el estrecho o nulo margen de beneficio de sus explotaciones ante, además, el consolidado estrechamiento de la intermediaria industria manipuladora?
¿Cuántas veces el presunto desentendimiento, la indignidad aparentemente flagrante, el trato a veces vilipendioso y el acaso desprecio con el que los responsables institucionales y gubernamentales que deben atenderlas consideran las justas reivindicaciones y los intereses del sector geopónico que constituye unos de los que fundamentan primariamente a la economía nacional, máxime cuando la nuestra es en parte ciertamente agraria, destacando verbigracia que durante el bienio de pandemia se ha encontrado con mercados obstruidos y desequilibrios entre costes de producción y precios recibidos, resaltando el déficit hídrico y las incertidumbres que asoman en el próximo horizonte a tenor de la reforma de la PAC?
Es cierto que aquel que a la política practicante se debe requiere el voto individual que es mayormente urbano, y que se concentra máximamente en los grandes núcleos de población, extraordinariamente en las metrópolis, y no en los asentamientos rurales, también afectados por su dispersión territorial, lo que incide en el coste de los servicios sociales que se demandan Y que el peso del PIB agrario, excluido el que corresponde a la industria agroalimentaria, influye relativamente en el del conjunto nacional. Mas sin embargo los derechos y las correspondientes obligaciones, la igualdad ante la ley, siempre es marchamo común, sin privilegios ni desatención, de toda la ciudadanía, también la agraria. Y que a su prevalencia se debe el representante político de turno, sea cual sea su categoría administrativa; como del presidente del gobierno para abajo.
** Doctor ingeniero agrónomo. Licenciado en Derecho
