De la imperiosa necesidad de gastar dinero público nace Idiotas 2022, proyecto de investigación (cofinanciado por la Unión Casiopea y el Fondo Malversador Interestelar) cuyo producto más destacable es un ingenio tecnológico desarrollado en base a la Agenda para el Consumo Inteligente, eficiente cien por cien de las cosas. Hablamos del Bucle Inmanente, costoso mamotreto digital, inteligente y conectadísimo que permite controlar su propio consumo de la manera más inteligente, etc. y viceversa.

Quizir: en la práctica no sirve para nada (más allá de mantener ocupada y tonta a la población, y eso es más que algo). Está ahí, mamando luz con eficiencia energética, a la orden de «¡Maruja, actívate!», muy verde él, ella (¿o es ello?), creando puestos de trabajo, eso sí, colaterales a su fabricación, cotizándose al alza.

Gobiernos de todo el mundo, en democracias y con sus respectivas constituciones de bote, meditan ya posibles decretos que obliguen a todos los ciudadanos a instalar un Bucle Inmanente en sus domicilios. A modo de tamagotchi gigante, eficientísimamente ecológico, gana terreno como factor decisivo en la lucha contra el cambio cataclismático (dispone de pestañas y tapones desechables, pero totalmente reciclables, de los cuales cada año se producirán trillones, sin miramientos).

Hay que intensificar la producción a toda costa. Conectarlos veinticuatro horas (aprovecha la nueva tarifa), aunque no sirvan para nada. Y hay que ver mucha, pero mucha tele, y comulgar ciegamente con la Palabra Verde del respectivo Papá Estado y domiciliar la tasa verde no deducible. Solo así, con las calles plagadas de drones vigilantes y patinetes eléctricos repartiendo hamburguesas y nuevos accesorios para tu Bucle Inmanente conseguiremos salvar, todas juntas, el planeta… Neptuno.

Gobierno Virtual. Oficina para el Suicidio Digital Total. (Porque tú lo has querido, bonita).

*Escritor