Ahora que se acerca el verano volvemos a vislumbrar la apertura de espacios físicos y mentales. La apertura del verano de 2020 fue un paréntesis, como quien emerge de debajo del agua para tomar aire, porque a finales de septiembre se volvió a cerrar todo. A las puertas del verano del 2021, con la pandemia mucho más controlada y la vacunación avanzando a buen ritmo el panorama es otro, incluso con la desazón de si nos pasamos de frenada. Quizás porque hemos empezado a relajarnos un poco somos conscientes de lo mal que lo hemos pasado y de todo lo que hemos echado de menos. Por eso, ahora que respiramos mejor, podemos fijarnos en los efectos de lo que nos ha pasado por dentro. No quiero frivolizar. Sé que hay gente con problemas muy serios y sé también que quizás haya derivadas nuevas que ni conocemos. Pero también sé que con la reapertura colectiva está llegando la remontada personal.

Recuerdo una reunión telemática en pleno confinamiento. Era de trabajo pero con compañeros con los que hemos construido una relación personal. La angustia del momento se convirtió de repente en un ataque de risa. Solo yo sé lo que llegué a llorar, una vez terminada la reunión. La risa había abierto la puerta a la liberación de las emociones. Por suerte ahora estamos en otro momento vital.

Este sábado cinco amigas cenaron juntas y rieron como hacía tiempo que no hacían. Reír juntos es como cantar juntos o bailar juntos, es compartir de una manera orgánica las emociones que rebasan la literalidad de la palabra o el movimiento, es destilar una energía colectiva que es más íntima cuanto más códigos se comparten. Lo que se activa con esta corporeidad es insustituible.

Ahora que he tomado conciencia de los beneficios de la risoterapia solo deseo que los que están privados de reír con los suyos tengan la oportunidad de hacerlo pronto. Pienso en personas concretas que, seguramente, hace tiempo que no ríen a carcajadas. Si tuviera que pedir un solo deseo para la Noche de San Juan sería este. Y que si alguien todavía duda de la vacuna, que deje de hacerlo y se vacune.

*Periodista