Rafa Nadal, el mejor tenista de la historia en tierra batida, lo ha vuelto a hacer ganando por decimotercera vez Roland Garros. Con su vigésimo torneo de Grand Slam iguala a Roger Federer. Sus triunfos en los veinte grandes los ha logrado frente a: Federer, seis ocasiones; Djokovic, cinco; Thiem, dos; y Anderson, Berdich, Ferrer, Medvedev, Puerta, Soderling y Wawrinka, una. Por el contrario, ha perdido ocho finales: cuatro con Djokovic, tres con Federer y una con Wawrinka.
A partir de ahora, sin perder de vista a Novak Djokovic y sus 17 títulos, competirá con el suizo por el cetro del tenis mundial. Actualmente, los tres grandes (Big Three) de este deporte, nunca ha habido mayor rivalidad, suman 57 majors. De ellos, el mejor porcentaje de éxito en finales de Grand Slam lo tiene el español (20/28, 71,4%), seguido, a cierta distancia, por el helvético (20/31, 64,5%) y el serbio (17/27, 62,9%). El palmarés de Nadal se incrementa cada año y atesora ya 86 títulos individuales: 20 Grand Slam, 35 Masters 1000, 21 ATP 500, 9 ATP 250 y una medalla de oro olímpica. Los expertos en tenis consideran que a sus treinta y cuatro años, si las lesiones le respetan, aún podría conseguir incrementar sus registros, incluyendo varios torneos mayores. Recientemente, le ha sido concedida la Gran Cruz de la Orden del Mérito Deportivo, lo que le otorga tratamiento de Excmo. Sr. Resulta extraño que el mejor deportista español de todos los tiempos aún no la tuviera. En realidad, Rafael Nadal Parera ya era una excelente persona por su extraordinaria calidad humana tantas veces demostrada. Así, tras su triunfo en París y emocionarse con el himno nacional de España, declaró: «Hoy no puedo estar tan feliz porque no podemos celebrar en condiciones normales con todo lo que está pasando. Quiero reiterar mi apoyo a todas las personas que sufrieron con el virus». H
* Profesor
